Las familias de La Joyosa y Alagón están en pie de guerra contra el Departamento de Educación debido al deteriorado estado en el que se encuentran sus respectivos centros escolares. Tal es el hartazgo entre los alagoneros que han organizado para este domingo una manifestación para reclamar la "reforma integral inmediata" y la ampliación del instituto Conde Aranda, en la que participarán también los vecinos de Pinseque y Remolinos, puesto que les corresponde este mismo centro.

Denuncian que los equipamientos están "obsoletos", el edificio data de 1975, existen problemas de masificación, climatización y también para la accesibilidad de las personas con movilidad reducida, entre otras cuestiones. Por ello, y ante los "reiterados incumplimientos" por parte de Educación, este domingo, a las 11.30, se concentrarán en la puerta del centro, para posteriormente recorrer las principales calles de Alagón hasta llegar a la plaza de España, donde leerán un manifiesto. Las asociaciones de madres y padres de los colegios de los tres municipios apoyan esta protesta para la que los estudiantes que participan en los talleres de juventud de la comarca han preparado pancartas.

Ya este verano, las familias de este instituto exigieron a la DGA dos barracones más –el centro ya tenía cuatro aulas prefabricadas en el patio– para solventar los problemas de espacio que sufre. A última hora Educación los instaló y están en funcionamiento, aunque el dinero para el alquiler y las instalaciones eléctrica y de internet ha sido adelantado por el centro, explicaron desde la ampa.

Reparaciones urgentes

Las reparaciones urgentes que necesita el IES Conde Aranda fueron motivo de una reunión este pasado jueves con responsables de Educación. Según apuntaron desde la asociación de familias, el arreglo de las goteras y de la chimenea de la caldera que emite dióxido de carbono tiene que ser asumido con el presupuesto del centro. Por otra parte, la renovación de la cubierta y de la caldera la va a incluir Educación en un plan que se subvencionará con fondos europeos. Además, fuentes de Educación apuntaron que el consejero, Felipe Faci, se entrevistó recientemente con el alcalde de Alagón, Pascual Embid, y le avanzó que el próximo plan de infraestructuras incorporará una dotación económica para la ampliación del instituto.

Heraldo.es

Pese a todo, las familias siguen con su protesta en la calle ya que se trata de "compromisos verbales que no están por escrito ni tienen un calendario" y quieren "visibilizar" la situación que sus hijos vienen padeciendo desde hace tiempo.

Obras paralizadas

Por su parte, las obras del colegio Ramón y Cajal, del municipio de La Joyosa, que tendrían que haber estado para la Navidad del año pasado, continúan estancadas. "La ampliación se aprobó y licitó en 2021, pero el inicio de obra se fue retrasando. Tras varios cambios de fecha, en septiembre nos dijeron que estaría a mediados de octubre y ahora está prácticamente igual tras llevar parada más de tres semanas", puntualiza Miriam Cajal, representante de las familias en el Consejo Escolar del centro.

A consecuencia de ello, un grupo de niños está dando clase en un sótano en el que solo cuentan con luz artificial y que tiene una caldera de gasoil al lado, "con los correspondientes perjuicios de ruido y el riesgo de inhalar vapores que conlleva". También están utilizando como aula un pequeño espacio "que no cumple la normativa en cuanto al espacio mínimo del que debe disponer cada alumno" y otros dos grupos tienen que dar clase en lugares cedidos por el Ayuntamiento de La Joyosa, que también cede un tercer espacio para desdobles y refuerzos.

Las familias se mostraron "cansadas" por tener que reivindicar una y otra vez la finalización de las obras e instaron a los responsables educativos a que visiten las instalaciones, en las que el patio también se encuentra "estropeado" y "parcheado".

Fuentes de Educación reconocieron que se han producido "algunos problemas" en la citada obra y aseguraron que se están intentando solventar, con el objetivo de acabar lo antes posible. Mientras tanto, defendieron que los niños están en unas instalaciones que "reúnen las condiciones necesarias para recibir las clases".