El muevo Plan Hidrológico pretende dejar en buen estado en el 81 % masas de agua
Así lo explican desde la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) con motivo de la celebración este lunes del Día Mundial del Agua.
El nuevo Plan Hidrológico del Ebro 2021-2027 pretende que el 81 % de las 929 masas de la cuenca (824 superficiales y 105 subterráneas) presenten buen estado ecológico, así como garantizar los suministros esenciales. Este plan incluirá un amplio proceso de participación sobre las medidas para la gestión del agua y plantea novedades como la fijación de caudales ecológicos en todas las masas de agua, entre las acciones con el objetivo de un Ebro Sostenible.
Así lo explican desde la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) con motivo de la celebración este lunes del Día Mundial del Agua y que la presidenta del Organismo de cuenca, María Dolores Pascual, ha querido celebrar con un acto en la Balsa de Larralde, en el barrio rural de Garrapinillos en Zaragoza, al cumplirse los 25 años desde que se inició su restauración y que está reconocido como humedal singular de Aragón. Pascual ha estado acompañada de la delegada del Gobierno en Aragón, Pilar Alegría, y del alcalde pedáneo de Garrapinillos, Mariano Blasco.
En el acto se ha llevado a cabo la plantación simbólica de un olmo, una especie autóctona, importante como indicadora de biodiversidad, que se encuentra en recesión por verse afectada por la enfermedad de la grafiosis, por lo que la que se va a cultivar es una variedad resistente que procede del Programa Nacional de Mejora y Conservación de los Recursos Genéticos de los Olmos Ibéricos del Miterd.
La presidenta de la CHE ha adelantado que ya se trabaja en la redacción del borrador del nuevo Plan Hidrológico que tiene como principales novedades la implantación de caudales ecológicos para todas las masas de agua, la atención a las demandas, prevenir la contaminación difusa y la actualización y mejora del registro de zonas protegidas, con la incorporación de los planes de gestión de los espacios de la Red Natura 2000, los planes de recuperación de especies amenazadas y la ampliación de reservas hidrológicas.
Junto con el acto de plantación se ha realizado una visita por este humedal en el que se trabaja desde hace 25 años para su mantenimiento y para la divulgación del espacio y donde se han invertido 244.000 euros. La Balsa de Larralde es un estanque artificial con una superficie de inundación de 3,4 hectáreas que se ha convertido en un destacado refugio de flora y fauna autóctonos, apto para la observación, la divulgación y el estudio del medio natural.
El humedal está regulado por las acequias del Canal Imperial de Aragón y los excedentes de riego elevan el nivel freático que nutre este humedal. La Balsa de Larralde es un estanque artificial con una superficie de inundación de 3,4 hectáreas que se ha convertido en un destacado refugio de flora y fauna autóctonos, apto para la observación, la divulgación y el estudio del medio natural. La CHE inició en 1995 un programa de conservación de este espacio por su carácter patrimonial, al ser fruto de las excavaciones que se realizaron en el propio Canal Imperial.
En los últimos años el Organismo ha intervenido en 16 humedales de las provincias de Álava, Burgos, Huesca, Guadalajara, La Rioja, Navarra, Soria, Teruel y Zaragoza, mientras que para 2021 están previstas nuevas actuaciones en las lagunas de Elciego (Álava) y Olite (Navarra).
También se han creado nuevos humedales integrados en proyectos de restauración y de reducción del riesgo de inundación, como en el Arga en Funes (Navarra), o en Alfaro (La Rioja), donde se están llevando a cabo actuaciones Ebro Resilience.
En este Día Mundial del Agua también se destacan novedades en la Estrategia Ebro Resilience para reducir el riesgo de inundación en el tramo medio del Ebro, desde Logroño, hasta La Zaida (Zaragoza) y que es la aplicación del Plan de Gestión de Riesgo de Inundación del Ebro en este tramo. Tras cerrar la fase de estudio y de participación, el tramo 8 Cabañas de Ebro, el primero aragonés de la estrategia, ha pasado a su fase de tramitación ambiental y fase de anteproyecto.
Esta semana, además, se celebran nuevas jornadas deliberativas con los interesados para presentar junto al Gobierno de Aragón otro estudio de alternativas técnicas, el tramo de Remolinos. El planteamiento para todos los tramos es la protección de las zonas urbanas para avenidas con periodo de retorno de 25 años y, para zonas no urbanas, conseguir la reducción de afecciones para avenidas hasta un periodo de retorno de 10 años.
Además de soluciones técnicas para 260 km de río, divididos en 15 tramos, se realizan actuaciones medioambientales complementarias que suponen la inversión de 2,4 millones por parte del Ministerio.
Consisten en la retirada de especies de flora invasora en los ecosistemas que se prevén recuperar para el espacio fluvial y que se encuentran degradados por su presencia en Alfaro, Calahorra y Aldeanueva de Ebro (La Rioja), Ebro en Buñuel, Ribaforada y Tudela (Navarra) y en la Reserva Natural de Los Galachos de La Alfranca, Camino Natural de La Alfranca y Los Galachos de Juslibol en Zaragoza.
También se redactarán 10 proyectos para la permeabilización de azudes en el Eje del Ebro, con objeto de recuperar la continuidad fluvial del río en esos tramos en las tres Comunidades Autónomas. El Plan del Ebro también tendrá protagonismo en la jornada técnica online 'La planificación hidrológica: nuevas oportunidades' para explicar las novedades del plan hidrológico de la cuenca del Ebro.
