La Asociación para el Estudio de la Lesión Medular Espinal (Aesleme) calcula que en 2018 fallecieron en Aragón un 48 por ciento más de peatones en atropellos que en 2017 y, a falta de datos oficiales, unas 150 personas sufrieron lesiones medulares irreversibles en accidentes de tráfico, una tendencia "en alza" que ya suma 1.400 víctimas en los años de trabajo de la asociación.

Con el objetivo de reducir el número de víctimas a cero y recuperar "el sentido de la vida", Aesleme ha presentado este miércoles ante un centenar de estudiantes de 17 años del Colegio Nuestra Señora del Pilar-Salesianos de Zaragoza las campañas de concienciación y educación vial 'Te puede pasar' y 'Si controlas, vuelves'.

"Las víctimas tienen nombre y apellidos", ha subrayado el delegado provincial de Aesleme, Francisco Ureta, en declaraciones a los medios previas a la presentación de la campaña, razón por la cual quieren reducir a cero el número de víctimas en accidentes de tráfico.

Ureta lleva diez años concienciando a los jóvenes y a otros ciudadanos porque cree que el problema no radica solo en la educación, sino también en la "falta de actitudes", y la solución puede venir mediante el trabajo en el "cumplimiento de la norma" y el "respeto" a los demás.

Francisco Ureta se quedó en silla de ruedas en 2008 tras ser golpeado por detrás cuando circulaba en moto por la Z-40, y ha querido mostrar las consecuencias de ese "mal llamado accidente" a los jóvenes para que sean conscientes de que no se puede llegar "a este lado del muro" por culpa de "un whatsapp o por una copa de más" ya que, de hacerlo, lo tendrán que pagar "toda la vida".

"Yo me despedí de la vida, de mi familia y del mundo", ha confesado el delegado de Aesleme, quien también ha asegurado que se prometió a sí mismo que, si lo superaba, dedicaría su vida a transmitir un mensaje de empatía para que lo que le pasó a él no se repita.

En la charla también ha participado el jefe del sector de Tráfico de la Guardia Civil en Aragón, el coronel José Galiana, quien ha destacado la importancia de la "educación en valores" para concienciar de que el coche puede ser "una máquina de matar personas".

La reciente reducción de la velocidad máxima a 90 kilómetros por hora en las carreteras convencionales es una medida que el coronel ha asegurado que servirá para reducir el número de fallecidos que, precisamente, aumentó el año pasado en Aragón pese al descenso en el número de accidentes debido a, probablemente, el "incremento de edad" de los conductores, aunque Galiana ha reconocido que todavía se está estudiando.

La labor de los equipos de emergencias es muy importante en los accidentes de tráfico, ha reconocido el médico adscrito al 061 en Zaragoza José Alejandro Solá, porque son los primeros en valorar al paciente y trasladarlo de manera adecuada al hospital para evitar lesiones mayores.

En ciudad, ha explicado el médico, suelen encontrarse con fracturas de huesos largos o de cadera, mientras que en carreteras, con accidentes más graves, son más frecuentes las lesiones medulares.