Loscorrales y su baza: mucha paz a la vera de Huesca

La tranquilidad de este municipio, vecino de Ayerbe y bien comunicado, es un valor apreciado por sus vecinos, que celebran ahora la fiesta invernal con más afán que ninguna otra.

Félix Lacambra, en el patio de su casa familiar, que está a la venta, A la derecha, acceso a la bodega y el lagar.
Félix Lacambra, en el patio de su casa familiar, que está a la venta, A la derecha, acceso a la bodega y el lagar.
Laura Uranga

Desde 1983. Son 36 años y no, no han pasado en un vuelo para José María Laborda; cuando era un chaval de 26 y llevaba el bar del pueblo recibió por primera vez el voto de confianza de sus vecinos para ser alcalde, y lo ha ido renovando desde entonces. Los más jóvenes del lugar, como el agricultor y herrero Mariano de Pablo hijo, no han conocido otro primer edil al frente del municipio. "¿Presentarme para repetir? Un poco cansado estoy, pero no digo que no, quedan unos meses. Soy de aquí, vivo aquí, trabajo aquí en el campo; Loscorrales es mi vida. Cultivo cereal y tengo algo de almendro, lo llevamos todo a la cooperativa de Ayerbe. La ganadería ya se acabó por aquí, somos mayores y hay poco relevo". Con este rápido resumen hace una fotografía socioeconómica de su municipio, que por desgracia tiene coros a distintas voces en las cuatro esquinas de Aragón. En el pueblo no quedan negocios fuera del sector primario.

Si su actividad se desarrollara en un ring de boxeo, José María podría calificarse de púgil fajador, de aguante. Fue el primer presidente de la Mancomunidad Gállego-Sotón, diputado provincial entre 1991 y 1995 y en los últimos años ha venido ejerciendo como consejero comarcal. "Es importante estar en estos sitios para defender los intereses de un municipio, además de conocer problemas y necesidades de los pueblos vecinos. En Loscorrales hemos perdido gente y negocios, aunque tenemos el bar para juntarnos; lo llevan Elena y Diego, una pareja que vino hace más de 15 años y están ya identificados con el pueblo. Casi todo los  jóvenes trabajan en Huesca, y alguno que trabaja la tierra aquí duerme en Huesca. En invierno dormimos la mitad del censo, unos cincuenta".

José María desgrana su análisis de la actualidad local un viernes por la tarde, día fresco aunque soleado; la plaza está llena de leña y las brasas listas para humear. Un tractor sigue descargando tocones junto a las cenizas para alimentar al día siguiente la hoguera de San Babil, fiesta grande en la localidad. "La Asociación de Amas de Casa Virgen de la Gaberdola es la única que queda activa aquí; hoy vienen a preparar el mondongo de San Babil. Vinieron una vez de la tele aragonesa a filmarlas: otra vez bajamos a ver el programa de ‘Sin ir más lejos’ el día de San Valero, nos tocó roscón –sonríe– y todo muy bien".

En el capítulo de fiestas no se pueden olvidar las de agosto en honor de la Virgen de la Asunción. La parroquia está consagrada a ella; es románica (siglo XII) y su torre está rematada con un chapitel piramidal. La talla de Nuestra Señora de la Vid y un retablo del siglo XVIII son los principales atractivos de su interior. Aunque la restauración convirtió el edificio en un compendio de estilos, la portada del muro sur se conserva a la perfección. "Vamos en romería a la Virgen de la Gaberdola el 2 de junio; está a unos 6 kilómetros por carretera, un par menos por caminos. Hay otra romería a la misma ermita el día de San Isidro, el 15 de mayo; lo que pasa con ese días es que no se mueve la fecha y la afluencia depende de si cae o no el fin de semana. Lo curioso es que San Babil era la fiesta pequeña, y ahora es la que más gente atrae", dice José María.

Félix Lacambra, también en el consistorio junto a José María, muestra la casa que fue de sus suegros; data del silo XIX, tiene corral y terraza, bodega con lagar… es muy bonita, y está a la venta. "Al pueblo lo quiero mucho, como todos los de aquí, pero estamos cuatro y no siempre nos ponemos de acuerdo para las cosas. A ver si las siguientes generaciones lo hacen mejor".

Mariano de Pablo hijo (su padre también es concejal con José María) está poniendo las mesas de la fiesta en el pabellón; los ingredientes del mondongo están a un lado, tapados con paños de tela. "Ahora soy agricultor; trabajo en mi pueblo aunque duermo en Huesca. He sido herrero con mi padre y mi tío desde chaval en Plasencia del Monte, a 7 kilómetros de aquí, pero ellos se jubilaron y yo decidí venirme aquí. En Loscorrales hay tranquilidad, buena carretera, cercanía con Ayerbe para las compras y Huesca para todo... eso sí, hace falta es que las grandes urbes no se olviden de los pueblos, que no falten los servicios, que la gente pueda pensar de verdad en quedarse aquí, como a muchos les gustaría".

En datos

Comarca: Hoya de Huesca

Población: 100

Distancia a Huesca, su capital de provincia: 26 km

Los imprescindibles

‘Castillo’ de Mondoz

En esta zona de la Hoya se llaman ‘castillos’ a grandes casas de labranza como la de este núcleo de Loscorrales; data del siglo XIX y presenta multitud de sillares de cantos irregulares, que denotarían un origen medieval del edificio.

El castillo medieval

Situado en Artasona (mismo nombre de la pedanía de El Grado) está situado en un cerro sobre campos de cereal, y conserva la mitad sur de la edificación, con dos torreones y los correspondientes lienzos de muralla.

Núcleos del municipio

Además de la propia Loscorrales, titular del municipio, se cuenta con los núcleos de Artasona, Mondoz, Navascués, Sargadillo y Puipullín. Las excursiones más habituales en BTT y caminata son a los barrancos cercano.


Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión