Una composición metálica revestirá la fachada del pabellón de Sádaba
La ganadora del concurso de ideas lanzado por el Ayuntamiento es Andrea Escribano, una joven arquitecta natural de la localidad y residente en Estocolmo.
Una estructura de perfiles metálicos atornillados al hormigón de la fachada, en colores azul, amarillo, blanco y ocre es la propuesta que lucirá próximamente el pabellón polivalente de Sádaba. El Ayuntamiento lanzó un concurso de ideas para dar un nuevo aire a este gran bloque gris, completándolo con un revestimiento.
La propuesta ganadora ha sido la de Andrea Escribano, una joven arquitecta de 25 años, natural de Sádaba y residente actualmente en Estocolmo. En total, se presentaron seis ideas y el jurado ha entregado, además del primer premio, dotado con 1.000 euros, dos accésit.
La plasticidad de la propuesta, la intervención sutil sobre el edificio y la facilidad del desarrollo en su ejecución. Estos son, según consta en el acta del jurado, los principales motivos que le han valido a la propuesta de Andrea para ser la ganadora.
Próximamente, su idea se plasmará en la gran fachada de hormigón. La composición contiene cuatro colores que representan, cada uno de ellos, un elemento del pueblo. El azul es por el cielo, el amarillo por los campos de cereal, el blanco de las casas y el ocre de la piedra caliza con la que se construyeron los elementos más emblemáticos de Sádaba.
Según ha explicado la autora, su propuesta trata de conseguir una fachada alegre y llamativa, un diseño positivo que represente a este edificio donde, además de actividades culturales, se destina a espacio de ludoteca y otras actividades con niños.
La decoración de la fachada del pabellón es una inversión más dentro del conjunto de la construcción. Queríamos darle un revestimiento en condiciones, ha explicado el alcalde de Sádaba, Santos Navarro. Con ella se quiere ofrecer una imagen más atractiva del espacio y contribuir a mejorar la estética general de la localidad.
La obra ya está adjudicada y los trabajos comenzarán en enero y se espera que la estructura esté instalada en marzo o abril. El coste total de la inversión ronda los 20.000 euros, que serán financiados por una subvención del Plan PLUS de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ).
