En las últimas tres semanas los TEDAX de la Policía Nacional han tenido que intervenir para neutralizar cinco artefactos explosivos que habían sido encontrados por vecinos de distintas localidades repartidas en las tres provincias de Aragón. 

El cuerpo policial ha destacado que el hallazgo de estos cuatro proyectiles de artillería y una granada de mortero ha sido posible gracias a la colaboración ciudadana y ha insistido en que no se debe tener "ningún temor" a la hora de poner en conocimiento el hallazgo o la tenencia de este tipo de objetos, "ya que debe primar siempre la seguridad".

"Se debe tener presente que, en la mayoría de los casos, este tipo de artefactos, a pesar del tiempo transcurrido, mantienen intacta su carga explosiva y, por supuesto, su poder destructivo, incrementándolo tanto por la cantidad de explosivo que portan como por la metralla que proyectan", ha recordado la Policía Nacional.

Además, aconsejan que cuando se encuentran este tipo de artefactos, se debe señalar el lugar del hallazgo, avisar a los servicios de emergencias y, a ser posible, utilizar medios de geolocalización.

Debe evitarse, en la medida de lo posible, que otras personas puedan acceder al lugar, así como manipularlo, recogerlo o trasladarlo a otro lugar y mucho menos llevarlo a domicilios o lugares habitados donde, si se produjese la explosión, los daños se multiplicarían, tal y como ocurrió hace unos años cuando a un joven que limpiaba junto a su padre un trastero en Teruel le explotó en las manos una granada que llevaba años allí.