La mitad de las familias numerosas tendrían más hijos si tuvieran más ayudas

La crisis demográfica se acentúa en España, donde nunca antes se habían registrado tantos decesos, según el Instituto Nacional de Estadística. En 2017 fallecieron 423.643 personas, la mayor cifra desde 1941, cuando arrancó la serie histórica, y un 2,3% más que en 2016. Las muertes, además, superaron a los nacimientos, que fueron 391.930, un 4,5% menos que el año anterior. En consecuencia se produjo un saldo vegetativo negativo y una diferencia entre nacimientos y fallecimientos de -31.245. La tasa de natalidad se situó en 8,80 nacidos por cada mil habitantes, mientras que el número medio de hijos por mujer fue de 1,34, una cifra muy baja respecto al resto de la Unión Europea y lejana al 2,1 necesario para garantizar el relevo de la población. Los hijos son un bien escaso.

Haciendo caso omiso de este panorama, más bien desolador, un colectivo de irreductibles se empeña en darle la vuelta a las cifras a base de traer hijos al mundo. Tienen tres, cuatro, cinco... diez... y son una minoría de familias en el total nacional. 676.000, en concreto. En Aragón, una comunidad especialmente afectada por la despoblación, están cuantificadas 16.000. Y van en aumento. La Dirección General de Igualdad y Familia de la DGA registró en 2017 un incremento de un 9,37% del número de familias numerosas de tres y cuatro hijos. Sin embargo, las familias numerosas de categoría especial, las que tienen cinco hijos o más, experimentaron una disminución del 24,79%. En España, desde el año 2011 hasta 2017, el número de hogares con tres o cuatro hijos aumentó un 30% hasta llegar a los 675.955, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad. Por su parte, los de cinco hijos o más reflejan intervalos de crecimiento a lo largo de los últimos años. En estos momentos existen 66.104. Al finalizar 2017, figuraban 14.827 con cinco hijos en adelante frente a los 14.704 del año anterior. Y una representación de todas estas familias se reúne este sábado en el Auditorio de Zaragoza, en el XI Congreso Nacional de Familias Numerosas, donde participarán expertos en demografía y pensiones y se analizarán los retos de futuro y las reivindicaciones de estos hogares.

Reivindicaciones que pasan sobre todo por un plan de ayudas coherente y efectivo. Porque tener tres hijos o más hace que los gastos del hogar se multipliquen y las familias hagan auténticos malabares para llegar a fin de mes sin telarañas en los bolsillos. “Aquí se mira hasta el último céntimo, y lo que para otros es un hecho normal, como ir al cine o a cenar, para nosotros es un gasto calculadísimo que solo se contempla en ocasiones muy especiales”. Lo dice, sabiendo de lo que habla, Alejandro López-Blanco, presidente de la Asociación de Familias Numerosas de Aragón 3ymás, colaboradora con la Federación Española de Familias Numerosas en la organización del congreso.

Descuentos y bonificaciones

En este sentido, explica que aunque estos hogares pueden acceder a una serie de descuentos y bonificaciones, “se podría hacer mucho más”. Las eléctricas, por ejemplo, no distinguen entre aquellas familias que tienen tres niños o las que tienen siete, y el recibo del agua también perjudica, a su juicio, a los hogares con más habitantes, ya que son los que más consumen. “Son cuestiones que deberían revisarse, porque son injustas”, afirma López-Blanco. Desde 3ymás reclaman un compromiso por parte de los partidos de continuar y aplicar el Pacto Autonómico de la Familia sin caer en “políticas partidistas”, en Aragón o a nivel nacional.

Así, instan a aplicar los consumos per cápita a la hora de premiar o penalizar el consumo de agua y luz tanto en las tasas municipales como en el cálculo del Impuesto sobre la Contaminación del Agua (ICA). Y aplicar asimismo el criterio de renta per cápita en todas las prestaciones o becas sujetas a límites de renta, para ajustarse a las realidades de cada ciudadano y que realmente se valore la situación socioeconómica y laboral de la familia.

También abogan por mejorar el descuento del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) para las familias numerosas. “La última revalorización catastral ha hecho que muchos pisos hayan pasado de los 100.000 euros, y en estos casos ya no se aplica ningún tipo de bonificación”, asegura López-Blanco, que defiende que quienes han optado por este modelo de familia no viven en casas más grandes “por capricho”, sino por necesidad. Además, incide en que el descuento aplicado es más bajo en Zaragoza que en Huesca o Teruel. Más allá de los alivios puntuales que ofrecen otros impuestos, como el del IRPF, con una bonificación de 1.200 euros para el tipo general, de tres y cuatro hijos, y 2.400 para el especial, a partir de cinco, colectivos como 3ymás reclaman “una prestación universal por hijo a cargo, no limitada a renta, de 125 euros por hijo al mes, similar a la que se da en otros países de nuestro entorno como Alemania, Francia, Polonia o Dinamarca”. “Solo pedimos estar en la media europea”, afirma.

Para el presidente de la Asociación 3ymás, es necesario eliminar las desigualdades autonómicas y locales en el tratamiento a las familias numerosas, y pone un ejemplo que para él es flagrante: el de las becas de comedor. En la convocatoria de este año del Gobierno de Aragón se especifica que “el máximo de renta familiar para tener acceso a estas prestaciones será, en el momento de la solicitud, de dos veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (Iprem) vigente para el periodo anual correspondiente en el que se abra el plazo de presentación de solicitudes”. Esto es, 12.908,06 euros al año. “¿Qué familia numerosa puede sobrevivir con este dinero?”, se indigna Alejandro López-Blanco, quien añade, tajante: “Estamos peor tratados que en otras comunidades autónomas”.

Radiografía de la familia numerosa en Aragón

La Federación Española de Familias Numerosas realizó una encuesta entre sus socios para realizar una radiografía de estos hogares, en la que en Aragón participaron un total de 89. De sus respuestas se desprende que la mayoría de las familias numerosas de la comunidad tiene tres hijos (69%), frente al 22% que tiene cuatro, o el 1% que se animó a tener nueve. Y sí, se animaron, porque para el 69% de los encuestados, este es el modelo de familia que más les gusta, nueve puntos por encima del total nacional, mientras que el 19% admite que los hijos fueron llegando. Y la gran mayoría, el 96% de las familias numerosas aragonesas encuestadas asegura que no se arrepiente de la cantidad de hijos traídos al mundo, frente al exiguo 4% que sí elegiría ahora tener menos descendencia. Más aún. La mitad de estas familias (51%) seguiría incrementando el número de descendientes.

¿Y por qué no lo hacen? Los ingresos fueron la razón más poderosa. El 47% de los hogares aragoneses participantes habría tenido más hijos si tuviera más dinero, seguido por mayores facilidades de los componentes de la pareja para conciliar (23%) o tener una casa más grande (5%). Continuando con el tema pecuniario, el 40% de estas familias declara ingresar entre 1.201 y 2.500 euros al mes; el 31%, entre 2.501 y 2.500; el 19%, entre 3.501 y 5.000; el 2%, entre 5.001 y 7.000, y otro 2% declara ingresar más de 7.000 euros mensuales. En el extremo contrario, el 4% de estas familias no llega a los 1.200.

¿En qué se va el dinero? Mayoritariamente, en la cesta de la compra. Alimentar tantas bocas se lleva el grueso del presupuesto mensual de las familias numerosas (89%). Le sigue el alquiler o hipoteca (65%), los suministros del hogar, como agua o electricidad (57%), la educación (42%), la ropa y el calzado (25%), o el coche (19%). Cierran la tabla el apartado salud, referido a los seguros médicos (2%) y el ocio (1%).

Precisamente, muchas de estas familias se quejan de que no pueden ahorrar, o apenas guardan algo de dinero a mes vencido. La mitad de ellas termina muy justa el mes, mientras que el 34% logra ahorrar algo. Al 16%, sin embargo, no le llega con el dinero que entra en casa e incluso tiene que pedir algún préstamo puntual. “Respeto mucho a las personas que han decidido tener menos hijos, o incluso no tenerlos, pero es injusto que nosotros, por el hecho de tener varios, no nos podamos permitir un plan de pensiones o un seguro de salud”, explica Alejandro López-Blanco. En este sentido, Benito Zuazu, presidente de la Federación Española de Familias Numerosas, considera que a los políticos les falta “visión trasversal” y comprender que apoyar a las familias “no es un gasto, sino una inversión”, que además es duradera y contribuye al bienestar social. “Lo que necesitamos en España es que haya niños que en el futuro puedan cotizar y mantener el actual sistema social.

Para López-Blanco, las familias numerosas invierten en quienes van a ser los adultos del mañana, y por eso considera “normal” que las administraciones les compensen, para rechazar los argumentos de quienes les dicen que si han tenido cuatro hijos, como es su caso, que apechuguen. “Lo hacemos muy a gusto, pero dentro de unos años, cuanto esas personas se jubilen, mis hijos cotizarán para pagar sus pensiones”.