Dependencia, tarea pendiente

La atención a la dependencia en Aragón ha mejorado, pero está lejos de cubrir efectivamente todas las necesidades.

Muchas personas siguen a la espera de recibir las ayudas que tienen reconocidas.
Muchas personas siguen a la espera de recibir las ayudas que tienen reconocidas.

El Gobierno de Aragón aumentará en doscientas el número de plazas concertadas en residencias privadas para personas mayores dependientes, pero este incremento, que es importante, no puede ocultar que la atención a la dependencia tiene que avanzar mucho todavía para dar respuesta a las necesidades de la sociedad aragonesa. Y en esa tarea, además de la Administración de la Comunidad, tiene que aportar más recursos el Gobierno central.

Esas doscientas nuevas plazas incrementarán hasta 1.935 el número de personas mayores dependientes cuya estancia en una residencia privada es subvencionada por la Administración aragonesa, en virtud del convenio marco firmado en 2014. Es cierto que estas cifras, unidas a las de las residencias públicas y a otras ayudas económicas, suponen una mejora importante en la atención a la dependencia registrada a lo largo de la legislatura. Sin embargo, es necesario reconocer que queda mucho camino por recorrer hasta que de verdad todas aquellas personas que no pueden valerse por sí mismas reciban el apoyo y la atención que necesitan.

Hay que tener en cuenta, en primer lugar, que en Aragón hay alrededor de 6.000 dependientes que tienen reconocido el derecho a percibir ayudas, pero que todavía no las reciben efectivamente. Y que otras 6.000 personas están a la espera de que se realice la valoración de su estado. Además, en muchas ocasiones las ayudas resultan claramente insuficientes. Cabe recordar que una parte de la responsabilidad le corresponde al Gobierno central, que continúa sin asumir completamente la parte que legalmente le toca en la financiación de la dependencia. Como saben perfectamente muchos ciudadanos, que lo viven día a día en sus familias, las situaciones de dependencia constituyen un problema social que sigue pendiente de una solución integral que alcance a todos los casos.