El melocotón registra en agosto precios de origen de récord, pero la falta de calidad preocupa al sector

La ciruela también ha alcanzado sus precios más altos en el último lustro, pero las numerosas lluvias y el granizo han hecho mella en la producción.

Cultivos en Albalate, destrozados tras una granizada
Cultivos en Albalate, destrozados tras una granizada
Vanesa Pequerul

Los precios en origen del melocotón y de la ciruela alcanzaron la penúltima semana de agosto los niveles más altos respecto al mismo periodo en los últimos cinco años. Concretamente, el agricultor recibió una media de 53,23 céntimos por cada kilo de melocotón y 78,40 céntimos por cada kilo de ciruela. Unas cifras muy superiores si se comparan con las de la temporada pasada, cuando los productos de la Comunidad aragonesa calificaron la campaña de “desastrosa” debido al desplome de precios que sufrieron, provocado por el solapamiento de las producciones y la ralentización de las exportaciones.

Durante la misma semana 34, del 20 al 26 de agosto, según el informe de los precios medios nacionales del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, recogido por Efe, los agricultores, en 2017, recibieron 28,07 céntimos por kilo de melocotón; en 2016, 40,93 céntimos; en 2015, 42,03 céntimos y, en 2014, 33,39 céntimos. En el caso de la ciruela, su cotización se situaba en dicho periodo, en 2017, en 48,82 céntimos el kilo; en 2016, en 45,97 céntimos; en 2015, en 68,84 céntimos y, en 2014, en 37,24 céntimos. Unos datos que han desencadenado en que en esta temporada se hayan alcanzado los precios más altos del lustro.

“Este año los precios han mejorado un poco, debido en gran medida a la falta de producto en el mercado, por esta razón, durante esta campaña, las preocupaciones son otras”, asegura Vicente López, responsable del sector de la fruta de UAGA. “Estamos ante una falta de calidad y de producción, sobre todo del melocotón”. Las numerosas tormentas, acompañadas de granizo en muchas ocasiones, han provocado que los frutos se hayan visto dañados en numerosas ocasiones durante el final del verano. “La piedra ha rajado la fruta en varios campos y las abundantes lluvias han hecho que se ponga blanda”, explica López.

Por este motivo, a pesar de la alegría inicial por unos precios más ‘decentes’, estos se han visto mermados en las últimas semanas, sobre todo en melocotón. “En la mayoría de ocasiones, la calidad no es la mejor y eso el consumidor lo nota y deja de comprar, lo que provoca que los precios caigan”.

Ante esta problemática, junto con una producción mermada en torno a un 20 y un 30% menos de fruta en el árbol que en una temporada normal, el sector frutícola confía en que los seguros les tiendan una mano. “Te ayudan a no arruinarte, es lo que siempre decimos, ya que solo cubren aquellos casos en los que la fruta está rajada, cuando está blanda no recibes nada, -alega el responsable del sector de la fruta de UAGA. La verdad es que a la mayoría no nos importaría pagar más dinero y que estuviésemos cubiertos ante todo tipo de fenómenos meteorológicos”. Ante esta situación, el sector mira al cielo pidiendo que las lluvias den un respiro, sobre todo las acompañadas de piedra con el objetivo de salvar lo que queda de campaña.

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