El gerente de la Fundación del Hidrógeno en Aragón, Fernando Palacín, explicó este miércoles que Francia, Alemania y Gran Bretaña son los tres países europeos que más apoyan el uso del hidrógeno en coches, autobuses y trenes para combatir la contaminación atmosférica. Opina que la apuesta de este gas natural, que sale de la unión entre agua y electricidad a través del electrolizador, está en plena expansión en transportes públicos al dejar de contaminar. "Aragón apostó por esta Fundación del Hidrógeno hace quince años y tenemos tejido industrial suficiente para responder al proyecto de Francia, con empresas que están con nosotros como CAF o PSA", sostuvo este miércoles el gerente. "Sería necesario que España apueste también como Francia. Macron acaba de destinar 100 millones para el hidrógeno", indicó Palacín, al referirse al lanzamiento de un plan para desarrollar el sector de los sistemas de transporte (poner en marcha 1.000 estaciones de repostaje y la introducción de 50.000 vehículos en los próximos 10 años), que pretende convertir al mercado francés es líder mundial.

El gerente indicó que ahora hay dos estaciones de suministro de hidrógeno en Huesca (en el parque tecnológico de Walqa) y en Valdespartera. Si se pusiera en marcha el tren de hidrógeno en la línea internacional cree que deberían instalarse otras "hidrogeneras" en Canfranc y en Huesca.

Palacín explicó que este nuevo modelo de transporte ofrece una alternativa cero emisiones para la flota de trenes diésel que no utilizan catenaria. Además, apuntó que la electricidad para producir este gas puede proceder de energía eólica de los aerogeneradores, en la que Aragón es excendentaria y produce suficiente para venderlo a otras comunidades que son deficitarias.

"El tren de hidrógeno no impide que haya otros ferrocarriles que utilicen la misma línea. Es como cuando convive un coche de gasolina y otro de gasoil. Y si luego se quiere utilizar para mercancías es cuestión de ampliar su capacidad y logística", concluyó Fernando Palacín.