Las primeras horas de la vuelta al cole se han desarrollado dentro de la normalidad esperada.

Alegría, mucha ilusión y algo de “susto” por el miedo a lo desconocido, fueron la tónica general entre los 109.279 niños de infantil y primaria que este lunes han retomado la rutina de las clases y el estudio en Aragón.

A lo largo de la jornada se irán conociendo si falta material en algún colegio, si todo ha estado a punto o ha habido alguna carencia. De momento, los chavales y los responsables del Departamento de Educación del Gobierno de Aragón se han mostrado satisfechos y confiados con este inicio del curso 2018-2019.

Sobre todo los más pequeños, los niños de primero de infantil que inician su escolarización este año: en total, 10.765 pequeños en toda la Comunidad.

Como Pedro, uno de los que esta mañana esperaba, somnoliento y “con un poco de susto” en el patio del colegio público Parque Goya, de Zaragoza, para entrar en su aula y encontrarse con sus compañeros.

Precisamente ha sido este centro el elegido este año por los responsables de Educación para dar por inaugurado el curso escolar 2018-2019.

El secretario general técnico del Departamento, Felipe Faci, ha explicado que se ha optado por él porque es un ejemplo de lo que la Consejería pretende para la educación aragonesa, aglutina las novedades y las propuestas defendidas para los nuevos centros.

Este colegio es integrado, cuenta con aulas para niños de dos años, tiene implantado el modelo BRIT de bilingüismo por el que ha apostado Educación, tendrá cocina propia...

Objetivos para este curso

En cuanto al curso en general, Educación  ha redoblado la apuesta por la escuela rural, la construcción de infraestructuras y la extensión del modelo de bilingüismo BRIT. Además se ha seguido disminuyendo las ratios, aumentando la oferta de aulas para niños de dos años y extendiendo el modelo de centros integrados, en los cuales los alumnos pueden estudiar desde infantil hasta secundaria.

Por otra parte, y gracias al nuevo decreto de escolarización, Educación garantiza este curso una matrícula equilibrada porque, por vez primera, se reservan plazas para alumnos con necesidades específicas de apoyo educativo durante todo el curso y en todos los niveles. Esto evita la concentración de estos alumnos en determinados centros tanto en el proceso de escolarización como en el fuera de plazo. Por otra parte, a lo largo de este curso escolar, ocho colegios aragoneses estrenarán cocinas propias con las que se mejorará la calidad de los comedores escolares.

Secundaria y bachiller

A los alumnos de infantil y primaria que comienzan este lunes las clases, se sumarán el jueves 13 de septiembre los de educación secundaria obligatoria (ESO), formación profesional, bachillerato, enseñanzas deportivas, artes plásticas y diseño. Los matriculados en grado medio y superior de FP, además de los inscritos en enseñanzas elementales y profesionales de música y de danza, empezarán las clases el día 17, mientras el 24 lo harán los matriculados en centros superiores de enseñanzas artísticas.

Una recogida de firmas y una cacerolada

El comienzo de este nuevo curso escolar se ve marcado por algunas protestas y reivindicaciones que afloran en diversos barrios de la ciudad. Así, en Parque Venecia, han sido varias las familias que han reunido firmas para pedir una auxiliar más en 1º de Infantil. Los padres creen que las dos profesionales contratadas son insuficientes para atender a los 156 niños de tres años repartidos en seis aulas.

Por su parte, en el colegio Julián Nieto Tapia de Miralbueno, un grupo de padres ha convocado para este lunes una cacerolada silenciosa en protesta por el cambio de horario decidido por el consejo escolar del centro a finales del curso pasado. Según explicó este domingo un portavoz de las familias, la queja, que se repetirá durante toda la semana, se hace, sobre todo, por el descontento que ha generado la forma como se decidió esta modificación, sin tener en cuenta la opinión de los padres.