Se acerca el verano y los españoles comienzan a planificar sus vacaciones. Según las distintas agencias de viajes, este año los aragoneses gastarán entre un 10 y un 12% más que en pasadas ocasiones. A nivel nacional, el turismo de sol y playa es el gran protagonista, siendo Palma de Mallorca, Ibiza y Menorca algunos de los destinos predilectos. Es cierto que nuestro país es famoso por su costa. De hecho, podemos encontrar playas fabulosas a pocas horas de Zaragoza. Sin embargo, el mundo es muy grande y escondidas entre puntos recónditos del planeta, existen maravillas como estas:

Tulum (México)

Aguas turquesas y cristalinas, arenas blancas y poca saturación turística. Únicamente con este marco, las playas de Tulum parecen el enclave perfecto, uno de los reductos  más increíbles y sin explotar que quedan de El Caribe. Sin embargo, lo que hace único a este lugar son las ruinas mayas que vigilan a los visitantes desde lo alto de los acantilados. Una mezcla de misticismo y belleza que convierte a esta playa en uno de los lugares más impresionantes del planeta.

Cayo Levisa (Cuba)

Enormes troncos de árboles secos crecen entre las aguas, creando un paisaje curioso y dotado de una hermosura extravagante. Los kilómetros de arena blanca se ven interrumpidos por un bosque de árboles sin hojas, lleno de cangrejos, pequeñas arañas y otros insectos autóctonos que se apartan al paso de los turistas. Tras superar la espesura, regresa la arena blanca y fina propia de El Caribe, bañada con aguas azuladas. Un lugar de contrastes alejado de las masificadas playas del entorno.

Cala Macarella (España)

Situada en el sur de Menorca, la Macarella es una cala virgen en forma de U rodeada de enormes acantilados verticales de roca caliza de hasta 30 metros de altura. Posee una gran cantidad de vegetación, protagonizada por frondosos pinares, además de una variada fauna marina donde podemos encontrar tortugas de mar.

Sarakiniko (Grecia)

En la isla griega de Milo se encuentra esta extraordinaria playa, comparada en multitud de ocasiones con un paisaje lunar. Está rodeada de rocas volcánicas blancas, torneadas por la erosión del viento y las olas durante años. Formas extrañas, paredes verticales y aguas de un azul intenso conforman este paraíso.

Matenwe Beach (Tanzania)

Al noeste de Zanzíbar se ubica esta playa de arenas blancas, con una larga línea de palmeras bordeando la costa, como si estuvieran protegiendo el lugar. Está rodeada por arrecifes de coral, por lo que es el lugar ideal para hacer 'snorkel' o bucear en las profundidades de sus aguas.

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