La falta de médicos complicará de nuevo las sustituciones de verano en algunos centros de salud, especialmente en los del Bajo Aragón y algunas zonas de Huesca. El sindicato de médicos de Atención Primaria denuncia que se volverán a tener que cerrar consultas o reducirse en algunas localidades ante las vacaciones de los facultativos titulares de las plazas.

La dificultad para cubrir las sustituciones de verano en algunos centros de salud es un problema enquistado desde hace tiempo. Pero algunas fuentes reconocen que los últimos años la situación ha empeorado, ya que se ha unido a la jubilación de muchos profesionales. De los 901 médicos de familia que trabajaban en 2015 en el Servicio Aragonés de Salud, 70 ya se han retirado y 209 lo harán entre 2018 y 2020. Las últimas ofertas públicas de empleo convocadas y la prórroga de la vida laboral hasta los 67 años intentan paliar, de hecho, estas bajas.

Pero, de momento, los coordinadores de los centros de salud intentan cubrir las vacaciones de verano a través de la bolsa de empleo temporal, que actualmente está conformada, según algunas fuentes consultadas, por unos mil efectivos. No obstante, muchos de ellos no están activos porque ya están trabajando con contratos temporales.

Así, son los centros rurales, los más alejados de la capital aragonesa, los que normalmente tienen más problemas para encontrar sustitutos. Incluso el Servicio Aragonés de Salud ha tenido dificultades los últimos años para cubrir las plazas de refuerzo que ha ofertado ante el incremento de pacientes en las zonas más turísticas, el año pasado sacó cerca de 15.

"La realidad es que ahora la Administración no pone trabas para intentar cubrir las sustituciones de verano, ahora existen otros problemas, la falta de médicos y el tipo de contrato que se ofrece", asegura el portavoz del sindicato de médicos de Atención Primaria, Leandro Catalán, que explica que en ocasiones, cuando no se encuentra sustitutos, otros facultativos titulares tienen que absorber las consultas de los compañeros que están de vacaciones.

Algunos profesionales advierten de que las circunstancias de Atención Primaria se dan también en el resto de especialidades para cubrir las plazas de la periferia. "La gente no quiere desplazarse más de 80 kilómetros de la capital aragonesa. Muchos médicos rechazan todo lo periférico", asegura Jesús Rodrigo, del centro de salud de Calamocha y miembro de Fasamet. De hecho, aunque existen también dificultades en centros urbanos, Rodrigo asegura que zonas, como las del Bajo Aragón o Barbastro, con localidades muy turísticas, son las que más sufren para encontrar recambios.

Ante esta situación, el presidente del sector sanitario de CSIF Aragón, Evangelino Navarro, considera que "algo se está haciendo mal" cuando existen efectivos en la bolsa de empleo de Atención Primaria, pero no "se pueden cubrir todas las vacantes generadas". "No se encuentran profesionales para trabajar. Esa es la realidad", apunta Navarro.

En esa línea, la portavoz de CSIF en Huesca, Ana Tarongui, asegura que la "situación va a peor" cada año que pasa y asegura que ante el déficit de facultativos, la única solución es disponer de plantillas suficientemente dimensionadas para poder tener una "autocobertura en verano" y no depender de encontrar recambios.

Falta de planificación

Una opinión que comparte el presidente del Colegio de Médicos de Huesca, José María Borrel, que achaca esta situación a una "falta de planificación" de los sucesivos gobiernos. "Se están cubriendo las sustituciones de verano como se puede. Ante la falta de profesionales, se están "doblando consultas y se van a tener cerrar otras en verano", recrimina Borrel, que recuerda que el tipo de contrataciones ofrecidas tampoco favorece la cobertura de los puestos más periféricos. "En otras comunidades autónomas ofrecen contratos de una duración más larga, por ejemplo, de un año. Esto quieras o no facilita que la gente esté más dispuesta a desplazarse fuera de las zonas urbanas", subraya.