El PP-Aragón confía en tener presencia en la próxima ejecutiva nacional del partido, independientemente de que gane la exvicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, o el exvicesecretario general de Comunicación, Pablo Casado. Fuentes de la delegación aragonesa desplazada al congreso extraordinario de Madrid aseguraron que se ha negociado con las dos candidaturas con el objetivo de revalidar la representación en el comité.

Desde el equipo de Santamaría se aseguró que contarán con alcaldes, concejales y presidentes de diputación "pensando en las próximas elecciones municipales y autonómicas". Ambas candidaturas ofrecieron integración en la ejecutiva, que estará compuesta por 35 personas. En el caso de Casado, dejará abierto el reparto de cargos del comité ejecutivo.

La incógnita sobre los nombres se resolverá este sábado nada más comience la segunda jornada del cónclave popular, en torno a las 9.30, cuando se hagan públicas las listas de ambos candidatos. En el anterior congreso, celebrado a principios del año pasado, Mariano Rajoy incluyó únicamente al oscense Roberto Bermúdez de Castro, ex secretario de Estado para las Administraciones Territoriales, además del presidente del PP-Aragón, Luis María Beamonte, que es miembro nato por su condición de líder regional.

Dirigentes y compromisarios del PP-Aragón aseguraron este viernes que la "inmensa mayoría" de la delegación se decantará este sábado en la votación por Pablo Casado, no solo porque fue el candidato que ganó las primarias en la Comunidad, sino porque los miembros del comité de dirección apostaron decididamente por él en la reunión celebrada el jueves. "De sus 22 miembros, solo tres se posicionaron con la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y otros dos no aclararon el sentido de su voto. El resto, estamos con Pablo", señalaron este viernes cinco de los asistentes, que respaldarán este sábado a Casado en el congreso extraordinario que se celebra en un hotel de Madrid.

No obstante, algunos de los compromisarios insistieron en que, aunque tengan decidido el voto "al 90%", esperarán a la presentación de las candidaturas para conocer quiénes optan a la ejecutiva antes de depositar su voto una hora y media después. "Es fundamental conocer qué equipo acompañará a cada uno y saber si contará con representantes que defiendan los intereses de Aragón", apuntaron varios de los compromisarios.

En esta línea, hicieron hincapié en que hasta el último momento puede haber reposicionamientos, especialmente en un congreso tan reñido, en el que ambas candidaturas se dan por ganadoras. "La noche se espera larga", señaló por la tarde un dirigente involucrado directamente en las negociaciones.

El que se mantuvo este viernes en su postura neutral fue el presidente del PP-Aragón, Luis María Beamonte, aunque su inmediata colaboradora, Mar Vaquero, y los tres presidentes provinciales, Javier Campoy (Zaragoza), José Antonio Lagüéns (Huesca) y Joaquín Juste (Teruel), mostraron su apoyo a Casado a través de las redes sociales unas horas antes de comenzar el congreso.

Aunque la dirección del PP-Aragón está con Pablo Casado, el partido ha reconocido públicamente la libertad de voto de los 117 compromisarios que deben elegir este sábado a las 11.00 al sucesor de Mariano Rajoy. No obstante, insta a la delegación a respetar "el sentir expresado" por la militancia de la formación en Aragón. Como se recordará, en la primera vuelta de las primarias, el pasado día 5, los afiliados dieron la victoria al exvicesecretario en Aragón.

En este mensaje insistió este viernes Beamonte, quien remarcó que no quería "condicionar" a ningún compromisario adelantando su voto e hizo un nuevo llamamiento para que la formación "vaya en piña detrás del nuevo líder" tras su elección. "El partido va a salir de este congreso con la misma fortaleza y cohesión, independientemente de que piensen en su legítimo derecho que las cosas vayan a salir de una forma u otra", dijo.

Aunque sus inmediatos colaboradores respaldan a Casado, el presidente del PP-Aragón subrayó que su voto vale "lo mismo" que el del resto de los 117 compromisarios. El primero en posicionarse en Aragón con el exvicesecretario de Comunicación fue el concejal zaragozano Pedro Navarro, que ha acudido al congreso para acompañar al que también es su amigo. "He visto a Pablo con muchas ganas y convencido de ganar", aseguró.