Una reforma necesaria

Lambán ha advertido a la Moncloa que la reforma del sistema de financiación autonómica “no se puede demorar más”.

Javier Lambán y Pedro Sánchez saludan a la militancia, ayer, en el Palacio de Congresos.
Javier Lambán y Pedro Sánchez, en un acto del PSOE en una imagen de archivo
José Miguel Marco

Javier Lambán ha advertido a la Moncloa que la reforma del sistema de financiación autonómica «no se puede demorar más», a pesar de que el presidente del Gobierno ya ha reconocido su incapacidad para hacerlo ahora. La debilidad parlamentaria de Pedro Sánchez es obvia, pero sí puede dar pasos para que se remodele en la próxima legislatura

Los problemas de financiación están a la orden del día en la DGA y algunos de los grandes ayuntamientos de la Comunidad. Es algo que ocurre en bastantes autonomías. Por eso, el presidente aragonés ha salido rápidamente a la palestra para reclamar a Pedro Sánchez que se inicie ya la negociación para reformar el actual sistema y reiterar que el nuevo modelo debe ajustarse al coste de los servicios. Tiene todo el sentido esta reclamación. De hecho, Lambán no ha hecho sino unirse a las voces críticas que, desde su partido y desde otras autonomías, se han lanzado contra el anuncio del presidente del Gobierno de postergar la reforma de la financiación hasta la próxima legislatura.

El de la financiación autonómica es para Sánchez un problema heredado de Mariano Rajoy, que hizo muy poco para solucionarlo. Ahora, en verdad, es difícil que con un grupo parlamentario tan exiguo (84 diputados) el nuevo Gobierno pueda lograr un pacto de Estado. No obstante, su obvia debilidad en el Congreso no le incapacita para trabajar con dos objetivos: primero, predisponer a todas las partes a un acuerdo y, segundo, fijar cálculos sólidos para establecer lo que cada uno quiere y, sobre todo, lo que cada uno puede llegar a obtener y cómo hacerlo. Por ejemplo, ya puede empezar a entretejer un pacto de solidaridad entre la España periférica y la del interior, para que el nuevo modelo tenga en cuenta la población y la dispersión.