Tercer Milenio

En colaboración con ITA

Investigación y empresa se dan la mano

Fertinagro Biotech y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas sellan su colaboración para innovar en herramientas que mejoren la competitividad agraria.

La presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, y el director general adjunto de Fertinagro Biotech, Sergio Atares.
La presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, y el director general adjunto de Fertinagro Biotech, Sergio Atares.
G. T.

A un lado, Fertinagro Biotech, la empresa que centraliza la I+D+i del grupo turolense Térvalis, dedicado a la alimentación (sector cárnico y vitícola), a la nutrición animal y vegetal, a la logística, a las energías renovables y al agroturismo, que emplea a más de 1.500 trabajadores en varios países y factura unos 500 millones de euros. En el otro, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la mayor institución pública dedicada a la investigación en España, y la tercera de Europa, adscrita al Ministerio de Economía y Competitividad. Y entre uno y otro, un protocolo general de actuación de carácter multidisciplinar, que lleva la firma de la presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, y del director general adjunto de Fertinagro Biotech, Sergio Atares, cuyo objetivo es impulsar el desarrollo de la investigación científica y tecnológica, para poner en manos de los agricultores herramientas, productos y procesos que les hagan más competitivos y sostenibles y les abran nuevas oportunidades de negocio, ya no solo en las cadenas de valor tradicional (alimentación, fibras e incluso biocombustibles), sino también en los ámbitos ambiental y social.

«La creación de nuevos biomateriales y servicios medioambientales y la generación de un nuevo renacimiento rural que genere igualdad de oportunidades para los ciudadanos» serán algunos de los logros que Fertinagro Biotech está seguro de poder alcanzar con la colaboración del CSIC, que además «permitirá a la empresa avanzar de forma exponencial en su compromiso para proporcionar más valor al agricultor y a las empresas de servicios», señala el grupo turolense.

Aunque la firma aragonesa tiene larga y exitosa experiencia en la investigación, con esta andadura conjunta el CSIC se convierte en el aliado perfecto que aportará el conocimiento multidisciplinar y circular con el que Fertinagro Biotech podrá resolver los problemas tecnológicos con los que pudiera encontrarse en sus innovaciones.

Entre ellas, la firma cita la generación de biomasa y utilización y tratamiento de los subproductos para generar valor añadido de manera circular, es decir, «desde el suelo a la biomasa (producción agrícola), de la producción agrícola hasta los sectores de alimentación, biomateriales y bioenergía y de los subproductos que resulten de los anteriores procesos hacia el campo de nuevo».

La presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, que reconoce y agradece el esfuerzo investigador de la empresa aragonesa, explica que esta colaboración «permitirá transferir conocimiento interdisciplinar y poner en valor la investigación, para que ésta se pueda convertir en algo tangible para la sociedad». Menéndez reitera que su deseo es que el organismo investigador y el grupo empresarial «progresen juntos en ámbitos tan importantes como el agrario, la alimentación, el medio ambiente y otras materias transversales, para adelantarnos a los problemas futuros con visión global y multisectorial».

Para el director general adjunto de Fertinagro Biotech, Sergio Atares, la alianza es «importante» para impulsar la investigación, la innovación y el desarrollo que realiza el grupo. «Todo el conocimiento que atesora el CSIC, caracterizado por su transversalidad y su visión global, será muy enriquecedor para seguir avanzando en bioeconomía circular a través de nuestra área indispensable de I+D», detalla Atares. Y explica además que la unión con la primera entidad española en investigación fomentará el avance de Fertinagro Biotech en la bioeconomía circular «con el objetivo de dar más valor añadido a sus clientes y a la sociedad, a través de la investigación y desarrollo para conseguir una economía más sostenible».

Acuerdos puntuales

La colaboración que recoge el protocolo recientemente suscrito por ambas entidades se materializará en acuerdos puntuales con algunos de los 122 institutos adscritos al Consejo Superior de Investigaciones Científicas, que aglutinan a más de 11.024 investigadores y personal técnico y de apoyo, que el pasado año manejaron 3.476 proyectos de investigación para el que dispusieron de un presupuesto de 654 millones de euros.

El acuerdo incluye además asesoramiento recíproco y el intercambio de información en materias de fomento, desarrollo y seguimiento de actividades científicas mediante la elaboración de informes y grupos de trabajo. Y abre la puerta a que las posibilidad de una cooperación en programas de formación de personal investigador y técnico o en la organización de actividades de divulgación científica y tecnológica a la sociedad.

Sus firmantes detallan que está prevista la creación de una comisión que se encargará de facilitar y garantizar el buen desarrollo del convenio, así como el cumplimiento y el seguimiento de las distintas actividades. Entre sus funciones estará también la de proponer las distintas posibilidades de colaboración en temas científico-tecnológicos de interés común, de seleccionar y decidir las materias y actividades concretas a llevar a cabo.

Más información en el Suplemento Heraldo del Campo

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión