A la espera de que las asociaciones de padres y madres (ampas) y representantes vecinales visiten este viernes los  tres nuevos colegios de los barrios del sur de Zaragoza –Valdespartera 3, Parque Venecia y Arcosur– que abren sus puertas el próximo lunes, el Departamento de Educación asegura que los tres centros recibirán a cerca de 550 alumnos con todas las garantías de seguridad y en condiciones. Mientras las ampas dan un voto de confianza a la DGA, las dudas sobre si las instalaciones reúnen todas las condiciones para acoger a niños pequeños siguen preocupando a algunas familias consultadas por HERALDO.

En el Parque Venecia, es un hecho que los alumnos de 3 años solo van a ocupar seis aulas y los espacios comunes, mientras en otras seis clases seguirán los trabajos menores. "Aunque nos han asegurado que estas seis estancias permanecerán cerradas y aisladas en todo momento y que no va a existir ningún tipo de molestia ni perjuicio, no lo tenemos tan claro. Además, solo van a poder disfrutar de mitad del patio de recreo, ya que la otra mitad la van a necesitar los obreros", lamentó este jueves Sheila Fuentes, una de las madres.

Esta afectada también criticó que la DGA no haya admitido que dos padres de cada aula pudiesen conocer hoy las dependencias. La visita prevista se ha limitado, en este caso, a tres representantes del ampa, el colectivo vecinal y la plataforma que se creó para reivindicar el cole. Este grupo de progenitores se pregunta porqué no aplazan la mudanza a después del 23 de abril o la festividad del Primero de Mayo.

La sensación de inacabado también intranquiliza a algunas familias del centro de Valdespartera, que acogerá a 240 niños. "Por lo que nos están contando, la sala multiusos sigue en obras y el recreo está pendiente de acabarse este fin de semana, para el que se anuncia lluvias", explicó uno de los padres. "La falta de planificación es un mal síntoma, porque en tres semanas, a contrarreloj y con refuerzo de las plantillas, están intentado hacer lo que no se ha hecho en meses", añadió.

El colegio Arcosur, al que irán 206 niños, es el más avanzado. Los padres ya han visto fotos de rincones interiores y estancias amuebladas. Aún así, madres como Myriam Lafuente reclaman que el solar del edificio de infantil se separe con un muro del lugar en el que en breve va a empezar a construirse el inmueble del primaria. "Los pequeños van a tener que convivir con la edificación del aulario de primaria y va a ser necesario que una parcela y otra se separen con un muro de obra, no bastará con una simple valla", apuntó.

Traslado del mobiliario

Educación insistió ayer en que los establecimientos abrirán sus puertas con todas las garantías de seguridad. "Se están ultimando los trabajos y haciendo el traslado del mobiliario. Es ilusionante que las familias cuenten con sus centros deseados, resolver la carencia de plazas y cumplir así con el compromiso de la inversión en infraestructuras", dijo el secretario general técnico del Departamento Felipe Faci. Desde Educación recordaron que el día previo del inicio del curso en septiembre se están limpiando y acondicionando los espacios.

La señalización exterior de los coles, otro quebradero de cabeza de las familias estos días, avanza poco a poco. Se han empezado a pintar y colocar las señales de proximidad de un centro educativo y de limitación de velocidad a 30 kilómetros por hora. También esperan vallas en las aceras de los colegios. Los semáforos tardarán en llegar.

Sobradiel también estrena el esperado colegio

Los 90 escolares del colegio del municipio zaragozano de Sobradiel también estrenarán el próximo lunes su nuevo colegio, que venían reivindicando desde 2011. En su construcción, que comenzó en marzo del año pasado, se han invertido unos 3,2 millones de euros (las obras las adjudicó Educación por un importe de 3.177.480 euros).

El centro tiene una superficie total construida de 2.636,88 metros cuadrados y se completa con otro bloque con un gimnasio y un comedor. Las nuevas instalaciones eran muy esperadas por las familias, ya que los alumnos daban clases en espacios dispersos y hasta cinco barracones. «Aunque el traslado ha sido algo precipitado, las llaves nos las dieron días antes de las vacaciones de Semana Santa, estamos encantados con el cambio. Tenemos hasta polideportivo, algo de lo que carecíamos», explicó este jueves la secretaria del ampa, Marga Carnicer. Estos días, el equipo docente y los propios padres están encargándose de limpiar y colocar el mobiliario y el material que se va a reutilizar. Lo que sí echan de menos es una limpieza generalizada.