Las visitas a Sijena

Aragón ha recuperado una parte importante del tesoro del monasterio de Sijena, pero, como anunció ayer el presidente Lambán, seguirá trabajando para que vuelvan todos sus bienes y para restaurar el edificio. Junto a ello, hay que garantizar ahora que los ciudadanos puedan conocer este valioso patrimonio y disfrutar de él, lo que requiere un régimen de visitas más amplio que el que se ha establecido.

Sijena ya exhibe su tesoro artístico
Los bienes de Sijena en Villanueva de Sijena.
Rafael Gobantes

La satisfacción por el retorno de los bienes de Sijena debe ir unida al deber de conservar ese patrimonio, estudiarlo, difundir su conocimiento y permitir su disfrute. Para ello, hay que seguir dando pasos para recuperar otros elementos del tesoro sijenense, empezando por las espléndidas pinturas de la sala capitular, que continúan en Barcelona. A continuar trabajando en ese sentido se comprometió ayer el presidente de Aragón, Javier Lambán, al inaugurar las visitas guiadas al monasterio; así como a restaurar el edificio. Es de esperar que esos proyectos vayan adelante, pues será muy positivo que el Gobierno invierta en la recuperación de un monumento tan significativo como este para los aragoneses. Ahora bien, el correlato lógico sería establecer un régimen de visitas bastante más amplio que el límite de dos días semanales (viernes y sábado) solicitado por las religiosas. Los ciudadanos no entenderían que, tras el largo litigio y el compromiso de la sociedad y de las autoridades civiles con la recuperación de este patrimonio, el monasterio se convirtiera en un recinto de difícil acceso. Quizás debería llegarse a un convenio con la orden religiosa propietaria, para que, respetando el retiro de las monjas, se verificase también, de la manera más amplia posible, el derecho de todos a disfrutar del patrimonio histórico.