Han terminado ya las obras que han renovado seis de las once terrazas con las que cuenta el colegio Moncayo de Tarazona. El Gobierno de Aragón ha efectuado estos trabajos para acabar con las filtraciones de agua que causaban trastornos en las aulas de Educación Infantil. El cubo que había recogiendo agua en medio de una de las clases, ya no será necesario.

Los trabajos finalizaron durante las vacaciones de Navidad. “Han cambiado mucho por la mejora estética que suponen, pero sobre todo lo que nos importaba era que no se filtrara el agua abajo, cayendo a las clases”, recuerda el director del centro, Héctor Sáez.

Durante muchos años se sucedieron intervenciones desafortunadas en estas terrazas, que no consiguieron solucionar las filtraciones. Ahora se han eliminado todas esas capas de materiales para atajar el problema de raíz. “Esta vez levantaron todo el suelo y empezaron desde abajo, echaron material impermeabilizante, hormigón, y la última capa con la baldosa, resistente a las condiciones climatológicas. A ver si esta ya es la definitiva”, explica Sáez.

Además, se la ha dado más inclinación a la terraza “para que vierta mejor y evacúe el agua”, y eso evitará que se embalse y filtre a la zona de abajo. “Se hizo una prueba inundando las terrazas y parece que está todo correcto”, asegura el director.

La actuación se ha centrado en las cinco terrazas que hay en las aulas del pasillo hacia la biblioteca y también la de la sala de profesores. “Queda todo el otro ala que da al lado del instituto, un total de cinco terrazas que también tienen el mismo problema aunque esta parte era más urgente arreglarla. Vinieron los técnicos del Gobierno de Aragón en varias ocasiones, y cuando certifiquen el fin de obra intentaremos que sigan con el otro lado, aunque eso ya depende de los presupuestos”, reconoce Héctor Sáez.

Bajo esas terrazas se ubican las aulas de la planta baja. Aunque las filtraciones eran mayores en la zona renovada, es cierto que el problema se irá agravando si no se actúa cuanto antes.