La Navidad, además de ser una época de paz, alegría y consumo, también pone a prueba año tras año la conciliación familiar. Del total de 109 centros escolares de infantil y primaria que este año han solicitado participar en el programa Abierto por Vacaciones del Gobierno aragonés, que permite que sus alumnos puedan acudir al centro durante las fiestas, 47 coles (29 de Zaragoza, 12 de Huesca y 6 de Teruel) ofertaron colonias y actividades para estos días navideños. Normalmente se organizan a través de las asociaciones de padres y madres y las gestiona una empresa o una entidad sin ánimo de lucro. No todos ellos se acogerán al final, ya que en algunos casos no ha habido suficiente demanda de padres interesados.

El colegio Ramón Sainz de Varanda, en el barrio de La Paz de Zaragoza, fue uno de los que ayer abrió sus puertas. A media mañana en la biblioteca, presidida por la tronca, una decena de alumnos, desde 1º de infantil a 6º de primaria, daban los últimos toques a una postal navideña después de almorzar.

"En Navidad hay una demanda muy inferior al verano y también a Semana Santa, pero siempre hay algunas familias que tienen que echar mano de este servicio", explica Blanca Rosales de la empresa de actividades extraescolares Oceano Atlántico, que dirige el programa. "Solo va a funcionar esta semana, de martes a viernes, porque la siguiente después de Año Nuevo no ha habido peticiones", añade. Su horario es de 8.00 a 13.00 (de 8.00 a 9.00 es para madrugadores) y nadie ha solicitado comedor.

La que sí estará a pleno rendimiento estos ocho días será la que la asociación El tren de las brujas organiza desde 2006 en el colegio Monte Oroel de Jaca. "Tenemos 50 niños inscritos y una media de asistencia diaria de unos 40. Una diferencia respecto a otros años es que el servicio de madrugadores lo ponemos en marcha a partir de las 8.00 en lugar de las 7.30, como en ediciones anteriores", apunta Elsa Rico, una de las socias. Esta aceptación la atribuye a que en la zona hay un elevado porcentaje de población empleada en el sector turístico. "Estas fechas son de mucho trabajo y no solo tenemos niños de Jaca, sino también alguno que viene de Sabiñánigo", comenta. Su horario, muy flexible y con posibilidades de contratar por días sueltos y distintas horas, es de 8.00 a 16.00 y la comida tiene que ser llevada por las familias.

La conciliación tiene un coste

El precio del programa Abierto por Vacaciones varía dependiendo del número de monitores contratados, de las actividades que se realicen y de los servicios que se presten. Así, en el Sainz de Varanda por esta semana sin comedor hay que pagar 26 euros, que se convierten en 33 con la atención a madrugadores. En el Monte Oroel de Jaca, el coste estimado por cuatro horas al día es de 6,30 euros por niño y el del horario completo de ocho horas es de 10 euros.

El desembolso económico puede ser mucho mayor si se tiene que recurrir o si se opta por iniciativas organizadas fuera de las aulas, una alternativa que se oferta cada vez más. Así por ejemplo, el espacio infantil El Parque de Karla, en Zaragoza, propone colonias de cuatro días a 44 euros de 9.00 a 13.00 (12,50 el día) y a 26 euros de 13.00 a 15.30 (7,50 el día). Incluye el almuerzo a mitad de mañana, pero la comida hay que traerla de casa. Y si estos días se quieren aprovechar para un intensivo de inglés, la semana (de 9.00 a 15.00) viene a costar 100 euros sin comida y 140 con ella.

Por otra parte, las colonias de invierno de Cruz Roja Zaragoza también comenzaron ayer en el centro la Fundación La Caridad. En ellas participan 90 menores provenientes de familias en dificultad social y este año la novedad es que se ha rebajado la edad de 6 a 3 años. Cincuenta niños estarán atendidos por el área de infantil y 40 por Cruz Roja Juventud con la participación de más de 20 voluntarios.