El frío incrementa la presión asistencial en las Urgencias con más camas cruzadas en los pasillos

La drástica bajada de temperaturas de las últimas horas ha recrudecido la situación en los servicios de Urgencias de la Comunidad aragonesa. Aunque el Servicio Aragonés de Salud no suspendió ayer ninguna operación para liberar camas, los principales servicios volvieron a tener que utilizar pasillos y salas anexas para dejar a pacientes.

Según algunos trabajadores consultados, las tres salas de observación del Miguel Servet estaban llenas y durante toda la mañana hubo entre 10 y 11 pacientes en los pasillos pendientes de ingreso. La situación en el resto de hospitales tampoco estaba mucho mejor. Los boxes de Barbastro y Clínico estaban también a pleno rendimiento y en el Royo Villanova fue necesario de nuevo habilitar camas en la sala de Cirugía Mayor Ambulatoria para absorber los ingresos.

Los profesionales volvieron a pedir un refuerzo de personal para hacer frente a la demanda de atenciones. Por su parte, fuentes del Departamento de Sanidad confirmaron que ayer no fue necesario suspender ninguna intervención programada para dejar camas libres y facilitar los ingresos. Desde que comenzaron los problemas, se han tenido que cancelar más de 130 quirófanos, una gran parte en el Miguel Servet.

La anulación de operaciones programadas tiene como objetivo dejar libres habitaciones y así poder subir a pacientes desde Urgencias a planta. Uno de los problemas generados es el incremento de ingresos en los últimos días. En parte, porque la gripe (está circulando la cepa A H3N2) está afectando con más virulencia a las personas más mayores. Si normalmente ingresan una media de entre un 12% y un 13% desde los servicios de Urgencias, ahora se ha llegado a un 20%.

Según algunas fuentes de la dirección de Salud Pública del Gobierno de Aragón, el pico de la gripe puede llegar a finales de enero. Así que los casos seguirán incrementándose durante los próximos días y pueden continuar los problemas en Urgencias.