Los plazos de la entrega del nuevo avión de transporte militar A400M se han retrasado un año, pero ya hay una fecha definitiva. Esta aeronave que va a sustituir paulatinamente a los históricos Hércules C-130 del Ala 31 de la Base de Zaragoza va a ser entregada por la empresa Airbus Defense a principios de noviembre, según confirmó un portavoz de la sociedad a HERALDO. Un piloto de la empresa anunció en una conferencia sobre el nuevo avión en el Museo de Cuatro Vientos que la entrega se producirá el día 9 en un acto que será en Sevilla, sede de la empresa aeronáutica. El Ejército del Aire se hará cargo del avión y lo trasladará a la Base de Zaragoza, donde ya tiene dos hangares dispuestos y van a ampliar la plataforma donde el nuevo avión se desplegará.

Un equipo de pilotos y mecánicos del Ala 31 de la Base de Zaragoza está desplegado en Sevilla para realizar la recepción de la aeronave con los últimos vuelos de prueba de verificación de todos los elementos del A400M. Mientras tanto, la compañía aeronáutica Airbus Defense ya ha desplazado a quince personas, entre pilotos y mecánicos, a la capital aragonesa. El seguimiento del rodaje del avión con este grupo de trabajadores de Airbus (que estarán bajo el mando del coronel jefe del Ala 31) durante varias semanas forma parte del contrato entre la empresa y el cliente, el Ministerio de Defensa, para su puesta en marcha.

Convivencia con diez Hércules

La llegada del primer A400M, de los catorce adquiridos por España, no va a suponer la desaparición de uno de los diez Hércules que tiene el Ala 31. En lugar de suplir los aviones antiguos, en principio van a convivir los aviones de transporte en la misma unidad. Aun así, el Ala 31 de la Base de Zaragoza ha dispuesto a 50 personas para formarlas en el nuevo avión de transporte y han seguido cursos teóricos.

"Es un cambio muy importante entre los dos aviones y es lo mismo que nos ha pasado en Gran Bretaña o Francia hasta que son operativos los A400M", explicaron fuentes de Airbus Defense de Sevilla.

Ahora les toca a los militares del Ejército del Aire acostumbrarse al cambio de un avión del siglo XX a otro del siglo XXI, como de una máquina de escribir a un ordenador, compara uno de ellos. La planificación todavía no está definida, pero el A400M no empezará a participar en misiones hasta que los militares lo verifiquen, "como cuando se llevan los coches nuevos de rodaje", apunta otro militar.

Ampliación de la plantilla

El Ejército del Aire tendrá que aprobar un estudio sobre la capacidad de los 250 integrantes del Ala 31 y podría ampliar la plantilla conforme vayan llegando a Zaragoza las nuevas aeronaves entre 2016 y 2025. Según los plazos de entrega, el año que viene aterrizarán entre tres y cuatro A400M y desde entonces se recibirán de dos a tres anuales.

Asimismo, está previsto que el mes que viene se amplíe la plataforma frente a los hangares donde se desplegarán las nuevas aeronaves. Pueden ocupar 1,5 hectáreas, casi el doble de espacio donde están instalados los diez Hércules C-130.

Fuentes militares valoran que el nuevo A400M será "la envidia" de otras fuerzas aéreas porque "no hay otro avión de transporte con el desarrollo que ofrece". Los nuevos aviones están preparados para el lanzamiento de carga y de paracaidistas, y abastecer combustible a ‘cazas’. Pero el Ejército del Aire ha solicitado que también se suministre carburante a helicópteros.

"El A400M va a ser un nuevo modelo de transporte estratégico porque ahorra tiempo, es más económico y lleva más carga", advierte un oficial del Ala 31. Solo falta que Airbus cumpla el último plazo: el 9 de noviembre.