La DGA trabaja en un plan de empleo en colaboración con sindicatos y empresarios

La consejera de Economía del Gobierno de Aragón, Marta Gastón, ha anunciado este jueves la próxima presentación de un plan de empleo que elabora el Ejecutivo en colaboración con los agentes empresariales y sindicales y que tiene en cuenta, específicamente, a los colectivos más vulnerables.

Así lo ha anunciado a los medios tras participar en la inauguración del 7 Congreso de UGT Aragón, en el transcurso de la que el secretario general de la organización, Daniel Alastuey, le ha pedido agilidad en el diálogo social.

Un acto que ha coincidido además con la publicación de los datos de la Encuesta de Población Activa del primer trimestre del año y que reflejan un incremento del número de parados de 5.200 personas en Aragón, comunidad donde la tasa de paro se sitúa en el 15,3%, más alta que en el trimestre anterior pero, inferior, ha resaltado Gastón, a la de la media española.

Aunque como aspecto positivo la consejera ha resaltado el crecimiento de la población activa, ha reconocido que en el Gobierno de Aragón "no estamos del todo satisfechos" porque hay datos "sangrantes" como que 32.400 hogares en Aragón mantengan a todos sus miembros en paro, lo que indica, ha dicho, que hay que seguir trabajando en el ámbito del diálogo social, a su juicio, el "más idóneo para poner en práctica no solo las políticas sociales sino en materia de empleo".

Además, es que, ha apuntado, en el actual panorama ya no se habla solo de desempleados, sino de personas con empleo que están afectadas por la pobreza.

La consejera se ha pronunciado asimismo sobre los discursos de los dirigentes sindicales durante la inauguración del congreso de UGT, en el que también ha intervenido el de CC. OO., Julián Buey, quienes han puesto en valor la recuperación del diálogo social, pero han exigido "velocidad" para llevarlo a cabo.

Gastón ha asegurado que "cuanto se ha reivindicado desde la sala es cierto" porque los agentes sociales trabajan con la perspectiva y objetivo común, "de que el trabajo sea en beneficio del diálogo social y exige una serie de contrapartidas presupuestarias que lleva su tiempo hacerlas".

En este sentido ha reconocido que aunque "a todos nos gustaría una mayor agilidad", el trabajo ha estado marcado por el cierre de esas contrapartidas más el tiempo necesario para el proceso de diálogo y participación.

Un trabajo, ha dicho, que se va a "visibilizar y materializar" con el plan para la mejora del empleo de calidad, pendiente de "meros flecos" en una serie de contextos y materias, y que parte de la necesidad de abordar una "protección realista" de las personas.

Para ello se ha tratado de conocer cuál es la realidad empresarial por parte de las organizaciones empresariales y la laboral desde las sindicales para ver "con las posibilidades presupuestarias con las que contamos" cuál es el mejor diseño posible para que "esa empleabilidad sea más efectiva".

El plan además contempla la situación específica de cada uno de los colectivos más vulnerables para su inserción en el mercado laboral y ver cuál es la forma más efectiva de llevarlo a cabo desde la formación, la conexión con la universidad o las necesidades de las empresas.