Los juristas de la DGA ven muy difícil ganar un pleito a Agapito por otros tres desfases en Plaza

Los servicios jurídicos del Gobierno ven "importantes dificultades" de que Plaza pueda ganar un nuevo pleito a Codesport, la constructora de Agapito Iglesias, por otro desfase de 793.615 euros en tres promociones de naves industriales que le encargó entre 2003 y 2008. En un detallado informe, avisan de que la insolvencia de la empresa dificulta "extraordinariamente las expectativas de resarcimiento" en caso de que prosperase una causa penal o civil. Además, señalan que haría falta gastar más dinero en encargar informes periciales "más completos y detallados" y abonar las tasas judiciales.

Así se puede resumir el análisis de 16 folios sobre la viabilidad del ejercicio de acciones judiciales contra Codesport que encargó la plataforma logística hace un mes tras conocerse los informes periciales entregados hace un año. Sus socios deben tomar una decisión esta misma semana si no quieren que prescriba el plazo legal para incoar diligencias por la vía penal en el caso de mayor calado: el desfase de 703.584 euros en la promoción de naves ALI 10.3.1. En esta situación ya se encuentra una segunda promoción de naves, la ALI-4, cuyo desfase se estima en 39.808 euros, mientras que la tercera, la de la aduana de Plaza, están en plazo y el sobrecoste facturado alcanza los 50.223 euros. En los tres casos, las obras se encargaron con un contrato de llave en mano, en el que el precio estaba cerrado y por las que se pagaron 16,4 millones.

El informe señala que solo se podrían exigir 793.615 euros de los 2,6 millones del sobrecoste apuntado en las periciales. Semejante rebaja se explica en las propias cláusulas de los contratos llave en mano, que no permitirían reclamar todo el dinero pagado por trabajos no ejecutados. En este sentido, añade que resulta "muy difícil" que se consideraran como un "pago indebido".

Igualmente, los servicios jurídicos de la DGA apuntan otras dos consideraciones que dificultan ganar la batalla judicial. La primera, el hecho de que la obra ejecutada y su precio "se han aceptado, recibido y usado por Plaza durante un prolongado plazo de tiempo (cerca de 10 años), sin que se haya puesto de manifiesto en ningún momento que las naves no responden al fin de su contratación". Y apunta la posibilidad de que Codesport pudiera aportar pruebas de la autorización "expresa o tácita" de Plaza para las modificaciones.

"Voluntad de distraer fondos"

Una cosa es que los servicios jurídicos consideren muy difícil ganar un pleito y otra muy distinta que no aprecien un "conocimiento y voluntad de distraer fondos", pagando más de lo debido por las obras. En el informe se destaca la coincidencia temporal entre la última certificación de la promoción en la que se registra el mayor desfase y el pago de 58.000 euros de una las empresas de Agapito Iglesias (Multi-Inversiones 2005) al exgerente de Plaza Ricardo García Becerril "a través de la sociedad pantalla Pulsar [...] por un informe inexistente y falsificado ad hoc". Recuerdan que esta presunta dádiva forma parte del caso Plaza, en el que también consta otra consistente en la gratuidad del alquiler del local que ocupa la guardería de las hijas de Becerril, que pertenece al grupo de Iglesias.

De este modo, todas las promociones que encargó Plaza a Codesport están bajo sospecha. El sobrecoste millonario de las naves modulares ya le ha costado al empresario una primera sentencia a cuatro años de cárcel por un delito de malversación, dictada hace dos meses. La misma pena se impuso al exviceconsejero del Gobierno aragonés Carlos Esco (PSOE) y al exgerente de Plaza Ricardo García Becerril por un agujero de 8,7 millones en las cuentas de la sociedad pública.