El Huesca acaricia el liderato matemático

Hoy tienen la opción de subir otro nivel, el de afianzar de forma matemática que finalizarán la liga en el primer puesto, lo que les daría más opciones de poder lograr el ansiado ascenso. Aunque conseguir ya este objetivo no depende solo del Huesca, porque para ello debe vencer en su visita al Trival Valderas madrileño y esperar que el Athletic de Bilbao pierda en el campo del Fuenlabrada. Seis puntos separan al Huesca –que tiene 67– de su inmediato perseguidor –con 62–, y con nueve por disputarse todavía, sacar la calculadora es inevitable, pero los oscenses defienden la idea de que si no consiguen ganar, de nada servirá mirar el resultado de los bilbaínos.

Por eso, se centran en su rival de hoy, el Trival Valderas, que ha llegado a este final de temporada con la necesidad imperiosa de sumar de tres en tres para mantener la categoría. "Está claro que ellos quieren seguir el próximo año en Segunda B, por toda la repercusión que eso supone, y porque implica jugar contra equipos como el Real Madrid o el Atleti, y van a salir con todo, pero nosotros también tenemos nuestra necesidad y muy claro cual es nuestro objetivo, el de jugar un derbi el próximo año en la Romareda", auguraba Manolo tras el último entrenamiento del equipo antes de partir hacia Madrid. Las dimensiones del campo del Trival, mucho menor que el Alcoraz, y el hecho de que sea de césped artificial son otros condicionantes que pueden invitar a pensar en una sorpresa en la Canaleja.

Seguir incrementando los récords del equipo puede ser otra motivación para los oscenses, aunque durante toda la semana han insistido en que todo eso se minimizará si finalmente el equipo no consigue el ascenso, por ello apuestan por aprovechar esta buena dinámica como un impulso de cara a enfrentarse a las eliminatorias.

Tevenet ha incluido en la convocatoria a Mainz y Ros, que han entrenado a menor intensidad.