El agua mineral es cien veces más cara que la del grifo

El consumo de agua embotellada subió en 2013 por segundo año consecutivo en la comunidad.

Mari Luz Quintián compra agua en un supermercado.
El agua mineral es cien veces más cara que la del grifo
juan carlos arcos

Desde que hace quince días se hiciera pública la presencia de lindano en el río Gállego no ha parado de crecer el número de municipios aragoneses que no pueden beber agua del grifo. En la actualidad, seis localidades -Ardisa, Santa Eulalia, Piedratajada, Villanueva de Gállego, Biscarrués y Marracos- tienen que tener acceso a agua mineral para poder beber.


A pesar de que se han puesto depósitos para que los vecinos se puedan abastecer gratuitamente, "probablemente algunos preferirán ir a comprar agua embotellada por comodidad", señalan desde el Ayuntamiento de Villanueva de Gállego. Estos vecinos tendrán que enfrentarse a un mayor gasto, puesto que una familia de cuatro personas con un consumo medio de un litro y medio de agua al día gasta 20,4 euros al mes si compra la botella más barata del mercado. Por el contrario, si pudiera seguir consumiendo agua del grifo el gasto se reduciría a unos 20 céntimos al mes, es decir, cien veces más barata.


No obstante, el precio del agua embotellada puede incrementarse significativamente dependiendo de la marca que compremos, puesto que la más cara, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), cuesta 1,32 euros el litro y medio, lo que sitúa el gasto mensual en 158,4 euros, un coste casi ocho veces superior al de la más barata, que se encuentra a 0,17 euros el litro y medio.


A pesar del ahorro, muchas personas prefieren consumir agua embotellada. El sabor y sobretodo la composición y la seguridad de que no esté contaminada son algunas de las razones que les impulsan a seguir tomando agua mineral. Tal y como resalta Irene Zafra, Secretaria General de la Asociación Nacional de Agua Envasada (Aneabe), “no reciben tratamientos químicos ni desinfectantes, por lo que llegan al consumidor con sus propiedades naturales intactas y con una composición en minerales constante”.


De hecho, por segundo año consecutivo ha aumentado el consumo de agua en la comunidad aragonesa. En concreto, este 2013 ha llegado hasta los 60,84 millones de litros, una cifra que denota la mejora experimentada por el sector después de que en 2010 comenzara la caída por el efecto de la crisis. Ejemplo de ello es que mientras que en 2009 se consumían 71,72 millones de litros, un año después la cifra descendía hasta los 59,80 y al siguiente se situaba en los 51,84. “Con la crisis, la industria de las aguas envasadas ha experimentado un descenso, sin embargo, esta tendencia parece haberse invertido, especialmente, desde el comienzo de 2014, ya que en estos momentos, está experimentando un crecimiento de un 3%”, sostiene Zafra.

Aragón, concienciada con el agua mineral

Hace dos años, la DGA realizó un convenio de colaboración con Aneabe. “Pretendíamos fomentar la cultura y difusión de las aguas minerales, así como la divulgación de mensajes relacionados con la educación en hábitos saludables”, asegura Zafra.


Además, esta unión puso en relieve la labor que desempeña el sector de las aguas envasadas en la comunidad aragonesa. En concreto, el agua mineral genera más de 260 empleos en Aragón en las nueve embotelladoras que trabajan en el lugar. Estas empresas venden al año más de 450 millones de litros, es decir, un 15% de todo el agua mineral que se embotella en España. “Es importante que todas estas compañías se sitúen al pie de los acuíferos para envasar el agua conservando todas sus propiedades naturales”, puntualiza.