Tres de las farmacias investigadas por reventa de medicinas seguirán cerradas

Sanidad encarga la apertura de botiquines provisionales en Aguilón, Cariñena y Peñarroya. Se pondrán en marcha entre hoy y mañana

Las farmacias de  Aguilón, Cariñena (en Zaragoza), y la de Peñarroya de Tastavins (en Teruel) permanecerán cerradas, al menos de momento, según informaron ayer fuentes judiciales  al Gobierno de Aragón. Estos establecimientos fueron precintados el fin de semana por la Guardia Civil por su presunta relación con una trama de reventa de medicamentos con recetas falsas que habría defraudado una importante cantidad de dinero al Servicio Aragonés de Salud. Ante la clausura de estos servicios, Sanidad ha dispuesto la apertura de botiquines provisionales en las localidades afectadas por estos cierres. 


De momento, se está pendiente del futuro de la farmacia de Monroyo (Teruel), también precintada desde el fin de semana, ya que según informó Efe, esta ya no estaría afectada por el cierre y el Gobierno de Aragón está a la espera de saber si la titular se va a incorporar para reordenar o no el servicio.


La farmacéutica de Monroyo explicó que estaba aguardando a que le llegase una autorización del Juzgado para poder abrir su establecimiento, si bien a mediodía no se había producido dicha comunicación oficial. "Hoy doy el día por perdido", lamentó la boticaria. Por la tarde, esta farmacia del Matarraña, de la que depende el botiquín de Torre de Arcas, permanecía cerrada.


Por su parte, el abogado del farmacéutico de Cariñena, Rafael Ariza, explicó ayer a este periódico que ha recurrido la decisión del juez de clausurar la farmacia de esta localidad y ha aportado documentación sobre el alta que su defendido, además de farmacéutico, tiene como comisionista o distribuidor de medicamentos.  


Hasta que se adopte una solución definitiva sobre el futuro de las farmacias clausuradas, el Departamento de Sanidad ha elaborado un plan para que el suministro de medicamentos a estos dispensarios provisionales se haga desde las localidades próximas. Será la farmacia de Villanueva de Huerva la que se encargue de la gestión de la de Aguilón; la de Aguarón proveerá a Cariñena y Valderrobres, al botiquín de Peñarroya de Tastavins. 


Según marca la normativa, son los ayuntamientos de las localidades afectadas los que tienen que facilitar un local donde puedan abrirse estos botiquines. Asimismo, quedará por determinar el horario de los mismos. Hay que recordar que en localidades como Cariñena, con más de 3.500 habitantes, es necesario facilitar este servicio de forma continua y sin interrupciones. 


Las mismas fuentes de Sanidad recalcaron que desde el Gobierno de Aragón se ha había adelantado un plan para hacer frente a este situación y aseguraron que los nuevos botiquines podrían estar abiertos entre hoy y mañana (dependiendo de lo que cueste habilitar los locales donde se ubiquen). 


El presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, Ramón Jordán, destacó que el objetivo es que el suministro quede garantizado en todas las localidades. Y aseguró, de hecho, que se han reestructurado las guardias para facilitar los servicios a la población. "Los medicamentos están asegurados. Eso es lo que hay que transmitir", aseguró el representante del órgano colegial de la provincia zaragozana.Antecedente en mayo

La operación está dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Teruel después de la investigación del fraude que se destapó en mayo con la detención de la farmacéutica de Palomar de Arroyos (Teruel). Al parecer, su farmacéutica revendía medicamentos que previamente habían cobrado a la sanidad pública aragonesa utilizando recetas falsas. A la boticaria se le imputaba un delito contra la salud pública, otro de falsificación de documento público y un tercero de estafa al Sistema Aragonés de Salud. 


Algunos de los abogados de los farmacéuticos ahora investigados y a los que se les ha tomado declaración han negado cualquier conexión con este caso de la localidad de Palomar de Arroyos.