La Universidad de Zaragoza atrae a 3.000 alumnos de regiones vecinas

La subida de tasas de 2012 y la amplia oferta académica ha propiciado que este número aumente.

Entrada al campus de la Universidad de Zaragoza
La Universidad de Zaragoza atrae a 3.000 alumnos de regiones vecinas
Guillermo Calahorra

En los últimos años la Universidad de Zaragoza ha incrementado su número de alumnos matriculados en los nuevos grados y en las antiguas titulaciones. De hecho, en el último año ha crecido casi en 2.000 personas. De ellas, muchas provienen de pueblos aragoneses, pero también de otras comunidades autónomas, especialmente, de aquellas que son limítrofes con Aragón. En concreto, éstas aportan el 10,5% de los estudiantes de Zaragoza.


Este es el caso de Maica, una estudiante soriana de Historia. “Vine a aquí porque vivo en Ágreda y Zaragoza era la ciudad que más cerca tenía, además, me ofrecía la posibilidad de estudiar lo que siempre había querido hacer”, relata. Como en su caso, la imposibilidad de cursar los estudios en su ciudad y la cercanía a la capital aragonesa es una de las causas para venir a la Universidad de Zaragoza. “Todos los años viene gente de las provincias cercanas, por un lado, por la posibilidad de formarse en determinadas áreas y, por otro, por la subida de tasas que se produjo en 2012”, comenta Fernando Zulaica, vicerrector de Estudiantes y Empleo.


En total, más de de 3.000 alumnos llegan a la universidad procedentes de alguna de las comunidades limítrofes. Navarra es la que siempre ha contribuido con más estudiantes, una cifra que ha ido en aumento durante los últimos años, ya que durante el curso 2011/2012 venían más de 540, mientras que en el curso pasado estuvieron matriculados casi 800. “En este caso siempre ha sido normal que tanto Navarra como La Rioja aporten muchos matriculados, puesto que hasta los años 90 la Universidad de Zaragoza incluía estas zonas”, sostiene Zulaica. Del mismo modo, resalta que en las recién creadas universidades navarras todavía faltan algunas carreras. “Muchos vienen hasta aquí para estudiar medicina o veterinaria ya que no tienen estas titulaciones en su comunidad”.


Castilla y León también es una de las que más matriculados nuevos trae a Zaragoza. No en vano, en los dos últimos años ha pasado de tener 509 alumnos a 572, casi un 12,5% más. Mónica vino en 2012 a estudiar Bioquímica. “Quería hacer esta carrera, pero al ser de segundo grado, ya no estaba en casi ninguna universidad debido a la implantación de Bolonia, por ello, Zaragoza fue mi gran salvación, ya que era la única que la ofertaba”, afirma.


Crecimiento parecido es el que han sufrido los provenientes de la Comunidad Valenciana, que se han ampliado en un 21% en los últimos dos años. “Esto se debe a que en 2012, con la entrada en vigor del decreto Wert, las tasas académicas dejaron de estar más o menos unificadas y muchas comunidades las subieron considerablemente, mientras que nosotros las hemos mantenido con ligeras subidas”, explica Zulaica. De este modo, se podría entender este incremento de alumnado procedente de las comunidades más cercanas. “Este mismo hecho sucede en Murcia, donde tienen unos precios muy económicos y por lo tanto, reciben numerosos estudiantes de lugares cercanos como Alicante”, explica.

Los másteres no tienen tanta acogida

En el caso de los másteres la cercanía geográfica no es un aliciente para atraer nuevos estudiantes. “Los másteres no son como las carreras, no son iguales en todas las universidades, sino que son mucho más específicos y esto provoca que lo que atraiga sea el material de estudio”, asegura Zulaica. Por ello, en los últimos años la cifra de estudiantes procedentes de comunidades como La Rioja o Navarra se han mantenido casi inamovibles. Entre todas las limítrofes solo aportaron 128 estudiantes durante le curso pasado.