Crisis económica

Un nuevo repunte de usuarios vuelve a elevar las ayudas de las entidades sociales

Organizaciones como Cruz Roja, Cáritas o el Banco de Alimentos ya han superado sus cifras del año pasado y advierten de la ?cronificación de la pobreza? que sufren miles de familias en Aragón.

Dos voluntarias trabajan en el Banco de Alimentos
Un nuevo repunte de usuarios vuelve a elevar las ayudas de las entidades sociales

Este 2013 va a cerrar como un nuevo año de récord, al menos en lo que a la actividad de las entidades sociales que trabajan en Aragón se refiere. Tras varios años de crisis, en los que el desempleo y los problemas económicos cada vez afectan a más familias, las ayudas de organizaciones como Cruz Roja, Cáritas o los Bancos de Alimentos siguen creciendo y cada vez son más las personas que solicitan apoyo tras quedarse sin trabajo, perder las prestaciones o no poder hacer frente a sus gastos más básicos. Según un reciente informe de los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), desde finales de 2007 hasta ahoramás de 53.000 aragoneses han pasado a vivir por debajo del umbral de la pobreza, una situación en la que ya se encuentran 245.000 personas en toda la Comunidad.


?En septiembre ya alcanzamos la cantidad de ayudas que dimos durante todo el año pasado, así que calculamos que acabaremos el 2013 con un incremento de alrededor del 33%, tanto en dinero invertido en ayudas directas como en usuarios?, analiza Carlos Sauras, presidente de Cáritas Zaragoza. Esta entidad alcanzó en 2013 los 1,3 millones de euros en aportaciones directas a familias, de las que se beneficiaron más de 11.000 personas, por lo que este año se batirá un nuevo récord tanto de gasto como de usuarios.


"Nos gustaría poder decir que estamos notando una cierta mejoría, pero lamentablemente no es así", indica Sauras, quien cree que la pobreza de los aragoneses cada vez es "más intensa, más extensa y más crónica". Y es que el aumento de la actividad de la mayoría de las entidades es muy importante, pero todavía es más preocupante si se tiene en cuenta que, año tras año, no deja de crecer. "Es una auténtica epidemia social. Al principio de la crisis se notó especialmente en Zaragoza y más tarde en las localidades de mayor tamaño, pero ya ha alcanzado el medio rural y afecta a a puntos medulares, como la vivienda, la alimentación o la salud".


Para Cruz Roja Aragón la situación es parecida y prevén que este año finalice con casi un 50% más de gastos en ayudas directas a familias con necesidades. "Cerraremos el 2013 con unos 320.000 euros invertidos en estas ayudas, alrededor de 120.000 más que el año pasado", explica Julián Martínez, responsable de Intervención Social de Cruz Roja, entidad que este año ha decidido aumentar este tipo de aportaciones directas a las familias tras observar las carencias a las que tenían que hacer frente muchos aragoneses en su día a día.


Un ?repentino empobrecimiento?


?En los últimos años han demandado ayuda nuevos perfiles de usuarios, como familias que hasta ahora no habían estado en riesgo de exclusión y han sufrido un repentino empobrecimiento. También hay mucha gente desubicada que pierde parte de sus ingresos y no sabe cómo adaptarse a la nueva situación?, indica Martínez, quien recalca que desde Cruz Roja no solo se proporciona ayuda económica, sino que tiene especial importancia el apoyo que se brinda a los afectados por la crisis, incluso con programas de inserción laboral que ya han permitido encontrar trabajo a decenas de personas.


Cada día acuden a esta entidad entre 30 y 40 personas a pedir ayuda, lo que ha hecho que el número de demandantes no haya dejado de crecer durante los últimos años. "También nos encontramos con personas a las que no veíamos desde hace varios años, que habían logrado salir de esta situación, a la que han vuelto de nuevo empujados por la crisis", relata el responsable de Intervención Social. Con estas ayudas directas, que se adaptan a las necesidades de los usuarios y comprenden desde alimentación, pago de facturas, productos farmacéuticos o material escolar y ropa de abrigo para los niños, desde Cruz Roja pretenden ahorrar a las familias unos 150 euros durante tres meses para que puedan invertirlos en otros gastos de primera necesidad, como la vivienda.


Desde el Banco de Alimentos de Zaragoza, por ejemplo, aseguran que su actividad sigue creciendo, tanto en comida recogida como en la cantidad repartida. ?El año pasado acabamos con 2.100 toneladas y este año en octubre ya habíamos alcanzado las 1.900?, asegura José Ignacio Alfaro, vicepresidente de la entidad. Desde entonces, tres meses más de trabajo y, sobre todo, la gran cantidad de alimentos que esperan recaudar gracias a la 'Gran Recogida', una iniciativa que llevaron a cabo durante el fin de semana pasado y con la que se podrían superar las 200 toneladas en todo Aragón. ?Cada vez son más los centros que demandan nuestra ayuda y ya llegamos a 229 en la provincia de Zaragoza. En total, la comida del Banco de Alimentos llega a unas 25.000 o 26.000 personas?, señala Alfaro.


Ayudas autonómicas y municipales


Mientras el trabajo de las organizaciones sin ánimo de lucro no cesa, los servicios sociales también siguen aumentando su actividad y las ayudas como el Ingreso Aragonés de Inserción (IAI) y las que ofrecen los diferentes ayuntamientos de la Comunidad cada vez tienen más demandantes. Tanto desde Marea Naranja Aragón, colectivo que defiende que ?los derechos sociales no se conviertan en beneficencia?, como desde otras entidades y partidos políticos en la oposición en el Gobierno de Aragón llevan mucho tiempo criticando los retrasos que la Administración acumula con el IAI, que pueden dejar a los beneficiarios muchos meses sin ningún tipo de ingreso.


Las solicitudes de ayudas de urgente necesidad del Ayuntamiento de Zaragoza también se han multiplicado y el departamento de Acción Social del Consistorio cada vez tiene que destinar más presupuesto a este apartado. Durante el primer trimestre de este año, las ayudas aumentaron un 16% con respecto al mismo periodo del año anterior, mientras que en el segundo lo hicieron un 69% y en el tercero un 62%. Esto ha provocado que la partida presupuestaria inicialmente aprobada para este apartado -3,7 millones de euros- enseguida se quedó corta y el pasado verano ya reconocieron que serían necesarios otros dos millones para llegar a final de año. El Ayuntamiento de Huesca, por su parte, en mayo de este año ya había consumido más del 50% del presupuesto que tenía para las ayudas de todo el 2013, 135.000 euros.