Armando Martínez, abogado de profesión, forma parte del grupo de Vox en el Ayuntamiento de Zaragoza como concejal desde las últimas elecciones municipales. En su condición de presidente de la Junta de Distrito del Casco Histórico, habla de los problemas de una de las zonas más emblemáticas de la capital aragonesa y da posibles soluciones.

¿Cuál es la situación actual del Casco Histórico?

La situación es bien diferenciada en función de la zona. Por un lado, tenemos la Magdalena que es un barrio que ha crecido mucho y ha mejorado desde el punto de vista del urbanismo, la seguridad ciudadana y desde la perspectiva de la convivencia intergeneracional, ya que cada vez más jóvenes quieren vivir en la Magdalena. Luego tendríamos la parte central del barrio que, salvando el estado de los pavimientos y la limpieza en puntos concretos, se encuentra bastante bien. Por último, está el Gancho, que es donde más dificultades me he encontrado. Siguen los clásicos problemas de suciedad, salubridad, accesibilidad y seguridad ciudadana, que habrá que abordar en estos cuatro años.

Uno de los problemas es la seguridad. ¿Qué proponen para mejorar la situación?

En el Pleno de hoy, llevamos una moción que versa sobre la creación de una comisaría de Policía Local en el Gancho. Nos parece que podría contribuir a resolver muchos problemas.

¿Por qué llevan al Pleno la creación de esta comisaría?

Fundamentalmente, porque es una reivindicación vecinal y, en segundo lugar, porque consideramos que es necesario. Desde Vox siempre hemos defendido la seguridad ciudadana como uno de los pilares básicos y fundamentales de convivencia. Asimismo, defendemos también la limpieza y el cumplimiento de las ordenanzas en el distrito y nos parece que tener la cercanía de la policía en un barrio, donde existen estos problemas en mayor medida, podría ser una de las posibles soluciones.

¿Creen que hay emplazamientos para levantar la comisaría en el barrio del Gancho?

Si lo proponemos es porque hemos realizado un estudio profundo y sabemos que se puede hacer. Hay espacios y efectivos policiales. Es una cuestión de voluntad política.

¿Han calibrado el sentir de la policía?

Llevo varios meses reuniéndome con distintos sindicatos y agentes, y lo que me trasladan es que podría ser una solución. Además, lo que proponemos no es nada nuevo. Las comisarías de barrio era un modelo policial que ya existía y dejó de ser eficiente por la falta de efectivos de Policía Local. Pero esa situación se está revirtiendo y consideramos que, en las zonas más conflictivas, debería volver.

¿Buscan incentivar la seguridad de los turistas en una de las zonas con más patrimonio?

Por supuesto que sí. Estamos a favor de todo lo que sea facilitar el turismo y que la gente pueda caminar de forma segura por unas calles limpias. Cada turista que venga y se quede satisfecho, son otros dos que vendrán, porque este recomendará nuestra ciudad. Si nuestro turismo se va con una mala imagen, ocurrirá todo lo contrario, y no olvidemos que el Casco Histórico es el escaparate de la ciudad.

¿Cómo plantean mejorar la accesibilidad?

Partimos de la base de que en esta zona de la ciudad la accesibilidad es complicada desde la perspectiva urbanística, porque hay que respetar conjuntos históricos. Me parecería osado decir cuáles son las medidas a aplicar en materia de accesibilidad cuando hay una ordenanza aprobada que prevé la creación de una mesa y de una oficina de la accesibilidad, que es precisamente la competente para llevar a cabo los estudios necesarios, tratando el tema con las asociaciones y las personas que verdaderamente necesitan un entorno accesible.

¿Qué otros proyectos tienen en mente para el Casco Histórico? 

La hostelería es uno de los sectores a los que hay que ayudar para que hagan de Zaragoza una ciudad todavía más interesante a nivel turístico. Otro de los sectores que consideramos que es importante para el Casco Histórico es el cultural. En esta zona tenemos un número importante de edificios que forman parte del patrimonio histórico de Zaragoza y es necesario darles visibilidad, uso y, por supuesto, no tenerlos como los tenemos a día de hoy, abandonados algunos de ellos y prácticamente en ruinas. Son, junto con la seguridad que ya hemos comentado y el apoyo al comercio, esenciales para el distrito.

¿Están abiertos a propuestas del tejido asociativo?

Por supuesto. Llevamos tiempo reuniéndonos con todo tipo de entidades, desde sindicatos policiales, pasando por asociaciones de vecinos, comerciantes, culturales, e incluso con vecinos particulares que quieren trasladarnos sus problemas e inquietudes. Todo aquel que ha querido venir a hablar con nosotros ha sido recibido y se han escuchado sus propuestas.

Es su primera experiencia en política. ¿Cree que desde el Ayuntamiento se puede mejorar la vida de los zaragozanos?

Creo que se puede. Estamos representando a los ciudadanos. No empujar al gobierno a que desarrolle iniciativas que mejoren la localidad sería una irresponsabilidad. Sería defraudar a nuestros votantes y a todos los vecinos. Si estamos aquí, desde la oposición, es para mejorar Zaragoza.

Ha dicho usted que son oposición. ¿Por qué han solicitado ponerse en la bancada de la izquierda en los plenos?

Es una cuestión bastante lógica a nuestro modo de ver. Si el Partido Popular no nos ha querido dentro del gobierno municipal, es porque nos ha querido en frente, en la oposición, y esta se hace desde la bancada que se encuentra frente al gobierno. Si lo que vamos a hacer es confrontar ideas, exigir y preguntar al gobierno, estar enfrente facilita la interlocución.