Desde sus inicios en 1980, la empresa familiar de Agromonegros, ubicada en Leciñena, tiene un objetivo claro: desarrollar variedades de cereal que se puedan adaptar a climas cambiantes y generen resistencia a una mayor presión de enfermedades y plagas para dar valor a las cosechas de los agricultores. 

Trabajando para cumplir esta misión y dentro de sus planes de mejora surge la cebada Magallón. "Desde el 2001 trabajamos para obtener nuevas variedades que aseguren la trazabilidad y pureza varietal, la germinación y el óptimo estado sanitario, así como el buen resultado de la cosecha. Para ello, contamos con una extensa red de ensayos con diferentes caracterizaciones agroclimáticas en microparcelas propias, gestionadas por personal altamente cualificado, donde evaluamos las posibles variedades antes de sacarlas al mercado", explica Fernando Bagüés, gerente de Agromonegros. 

Finalmente, en 2010 consiguieron aterrizar sus esfuerzos con la obtención de las cebadas Icaria y Forcada. "A día de hoy, contamos con otras dos cebadas propias, Baliner y Pirene, y dos trigos duros, Iberus y Aneto. Magallón ha sido el resultado de no abandonar este proceso en busca de obtener las variedades más resilientes a las necesidades del mercado", añade Bagüés.

Magallón, una variedad más precoz y con gran capacidad productiva

Agromonegros

Esta cebada Magallón supone la culminación de mucho esfuerzo y trabajo, pero su desarrollo cubre de orgullo a Agromonegros. ¿Por qué es tan especial? "Esta cebada es más precoz y su ciclo es más alternativo", explica el gerente de la empresa. A estas mejoras se suma su buen rendimiento, que es muy importante, por un lado, en regadíos, porque la convierte en una variedad muy interesante para segunda cosecha, "algo que vienen demandando los agricultores cada vez más", aclara Bagües. Y, por otro, para secanos, ya que de esta forma el agricultor puede tratar de esquivar la sequía, un mal que, con el cambio climático, es cada vez más acuciante. "Además, es más sana que otras cebadas de similares características", añade.

Cabe destacar también de esta variedad su gran capacidad productiva. Desde Agromonegros aclaran que siempre tratan de mejorar la productividad en cada una de las nuevas variedades que lanzan al mercado. "Magallón, concretamente, destaca y se adapta especialmente bien en todas las regiones cerealistas españolas en las que predomina el cultivo de cebada: Aragón, Castilla la Mancha, Cataluña… Así lo acreditan los ensayos de Registro realizados por la OEVV (Oficina Española de Variedades Vegetales), siendo nº 1 en la campaña 2020-21, y los últimos ensayos que hemos conocido de la Red GENVCE (Grupo para la Evaluación de Nuevas Variedades de Cultivos Extensivos en España), en los que Magallón ha resultado entre las variedades más destacadas en el 80% de las localidades de dicha Red de ensayos", señala Bagüés.

Así, desde Agromonegros continúan con su labor de investigación y obtención ya que, como explica Fernando Bagüés, están convencidos de que "las mejores variedades de semilla para España solo se pueden conseguir en España". Además, el gerente transmite el sentimiento de orgullo que esta variedad provoca en toda la empresa: "Estamos orgullosos de esta variedad porque desde los secanos más productivos de Huesca a los más áridos de la Región de Murcia, el agricultor que siembre Magallón va a quedar satisfecho".