"Aunque cada año crezcamos más, seguimos sintiendo la empresa como ese pequeño almacén familiar de Jaca"

Chocolates Lacasa lleva 171 años endulzando los hogares españoles con clásicos como sus turrones, sus Lacasitos o sus Conguitos. Una trayectoria exitosa en la que no han parado de crecer pero sin olvidar nunca sus raíces aragonesas.

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Corría el año 1852 cuando Antonio Lacasa, que vendía tejidos y garbanzos en un pequeño almacén de Jaca, empezó a hacerlo también con el chocolate que elaboraba y que acabaría marcando el paso de cinco generaciones de la familia. Nacía así Chocolates Lacasa, empresa familiar aragonesa que no ha dejado de crecer, pero sin olvidar sus raíces. Se trata de uno de los principales fabricantes turroneros del país, siendo pionero en el lanzamiento del primero de praliné de chocolate con almendras en 1943, y cuenta con presencia en 50 países, en los que genera el 40% de la facturación total, empleando a 800 personas. Su responsable de Grandes Cuentas, Juan Quintana, hace balance de su actividad y explica cómo están viviendo la actual campaña navideña. Todo ello en un testimonio que constituye la quinta entrega de 'Tesoros de la tierra', una serie de reportajes a través de los cuales Eroski da a conocer las manos que trabajan detrás de los productos de cercanía que pueden consumirse en sus supermercados, para todos aquellos que disfrutamos con la comida de auténticas raíces aragonesas por su implicación con la sostenibilidad y por su calidad.

Juan Quintana, en las instalaciones con las que cuenta la empresa en el municipio zaragozano de Utebo.
Juan Quintana, en las instalaciones con las que cuenta la empresa en el municipio zaragozano de Utebo.
Lacasa.

Numerosos hogares españoles ya se están endulzando un año más con sus productos de cara a las Navidades. ¿Qué expectativas tienen para esta campaña?

Nuestro objetivo en estas navidades del 2023 es conseguir llegar al mismo número de hogares que en las navidades de 2021. El año 2022 fue duro por el incremento de costes y este ejercicio hemos decidido bajar precios a pesar de la subida de las materias primas.

En 2022 cumplieron 170 años de vida. ¿Qué balance hace de una trayectoria tan amplia que comenzó en un pequeño almacén de Jaca?

Es gratificante formar parte de una empresa familiar española que da trabajo a 800 familias de forma directa. Y, aunque cada año crezcamos más, seguimos sintiéndola como ese pequeño almacén de Jaca.

Lacasitos, Conguitos, turrones… Sus artículos cuentan con una notable popularidad entre diversos sectores de la población. ¿Qué singularidades tienen y cuáles son los más demandados?

Nuestro producto estrella son los Lacasitos y la clave de nuestro éxito siempre ha sido la calidad del chocolate. Aunque el producto mida apenas 1 centímetro, siempre ponemos nuestro mejor chocolate. No en vano, los niños son los consumidores más exigentes (se ríe).

Preparación de los turrones fabricados en la planta que Chocolates Lacasa tiene en la localidad zaragozana de Utebo.
Preparación de los turrones fabricados en la planta que Chocolates Lacasa tiene en la localidad zaragozana de Utebo.
Oliver Duch

Hace poco lanzaron los Lacasitos picantes. ¿Qué valoración hacen de su acogida? ¿Tienen pensada alguna novedad más para el próximo año?

Hemos tenido una gran acogida en la generación Z, que es un público que no consumía tantos Lacasitos y, por lo tanto, hemos conseguido el objetivo, que es lograr entrar en nuevos hogares. Lanzamos el producto en septiembre, por lo que todavía estamos siguiendo de cerca la penetración del mismo. Para el año que viene la novedad vendrá de la mano de Conguitos y con dos variedades, una muy 'galleta' y otra muy 'verde'. Y hasta ahí puedo leer.

¿Por qué es importante defender los productos locales?

Aun siendo productos muy nacionales, siempre nos hemos sentido muy aragoneses. Es importante fomentar otras culturas y otras formas de consumo que nos enriquecen como sociedad, pero también lo es el favorecer a las empresas locales. Como he dicho, somos 800 familias las que estamos detrás de todos estos productos.

¿Desde cuándo trabajan con Eroski? ¿Cómo valora esta relación?

Con Eroski se podría decir que trabajamos desde siempre como proveedor nacional, y la valoración es muy positiva. Buscan siempre la complicidad con los productores y fabricantes aragoneses, ocupados en hacer llegar a sus clientes la mejor oferta local y de la forma más atractiva posible, y es ahí donde por parte de Chocolates Lacasa siempre es un placer colaborar con un equipo tan dinámico. Con marcas como Lacasitos, Conguitos, Mentolin o Lacasa y su disponibilidad a la hora de dinamizar el punto de venta siempre surgen oportunidades comerciales, como en esta campaña de Navidad, donde desde Chocolates Lacasa hemos hecho un esfuerzo en reposicionamiento de precios y de la mano de Eroski trabajamos estrechamente para que no falte turrón Lacasa en ninguno de los hogares de sus clientes durante todo este periodo.

¿A través de qué canales llegan a su público? ¿Cuáles les funcionan mejor?
Tenemos desarrollados todos los canales comerciales, desde grandes distribuidores como Eroski hasta las pequeñas tiendas de barrio. Todos ellos funcionan bien en función de los objetivos que se midan. Con Eroski, por ejemplo, tenemos una relación basada en la confianza que hace que el cliente encuentre siempre la oferta perfecta en sus tiendas.

Trabajadores de la empresa, durante los actos de celebración del 150 aniversario, en 2002.
Trabajadores durante los actos  del 150 aniversario.
José Miguel Marco
"Es gratificante formar parte de una empresa familiar española que da trabajo a 800 familias de forma directa"

¿Cómo trabajan cuestiones como la innovación o la sostenibilidad?

La innovación la trabajamos a través de nuestros productos, y como grupo lanzamos una media de 40 al año. Esa innovación la llevamos a cabo porque queremos estar a la vanguardia, pero también porque los mercados donde competimos así lo exigen. En cuanto a la sostenibilidad, es algo que nos tomamos muy en serio. Así, hemos adoptado en los últimos cuatro años unas medidas muy exigentes que nos han dado grandes resultados. Por ejemplo, el año pasado reducimos en un 52% nuestra huella de carbono, algo que no fue nada fácil de conseguir.

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